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Reportaje:

Grafitis para soñar en 2016

Córdoba implica a los jóvenes en su carrera para ser capital cultural

Si por algo se caracteriza el trabajo de la candidatura de Córdoba a ser capital europea de la cultura en 2016 es por su capacidad de implicar a los vecinos en esa ilusión. Muchas de las actividades que se han organizado han requerido la participación directa de los cordobeses, ya sea para engalanar las fachadas con las banderas azules de la candidatura o para prestar sus patios vecinales a atrevidas exposiciones de arte contemporáneo (como la celebrada hace un año).

Ayer, la calle volvió a ser el escenario clave. Concretamente el corazón de la ciudad, la plaza de las Tendillas, en pleno centro urbano. Bajo la mirada de la estatua ecuestre del Gran Capitán que preside el lugar, decenas de chavales participaron en diversas actividades culturales que reivindicaban el sueño de la ciudad de convertirse en epicentro cultural europeo dentro de cinco años. El centro de la fiesta fue un concurso de grafitis en el que participaron cinco jóvenes artistas aficionados a plasmar sus ideas con ayuda del spray.

Un mural onírico gana el premio del concurso de pintura celebrado en la calle

Esta vez solo se les exigía una cosa principalmente: que el protagonismo de su obra fuese el año 2016. Y, de entre ellos, se eligió un ganador que recibió de premio un viaje a Berlín. Quien tuvo esa suerte fue Fran Tomé, un estudiante 22 años en la Escuela de Arte Mateo Inurria. El joven, de origen guineano, cursa el segundo año de Ilustración. Y su técnica se nota en la pieza que plasmó. Una imagen realista de una niña durmiendo, rodeada de imágenes clásicas de la ciudad (los arcos de la Mezquita, el puente romano sobre el Guadalquivir, las fachadas encaladas con macetas llenas de flores) que se entremezclaban de manera onírica.

"Mi idea es que parezca un sueño", afirmaba Tomé sin dejar de trabajar. "La verdad es que me gusta especialmente el tema de los grafitis", reconocía este futuro ilustrador.

El resto de las obras finalistas retomaron algunas de las constantes de la iconografía clásica: la Mezquita, con su torre y sus arcos, las flores, la bandera andaluza o los ojos de la mujer cordobesa, fueron algunos de los motivos que aparecieron. Emilio José López, Kristopher Medina, Francisco Javier Carrillo y Kaze Vodka han sido los otros grafiteros participantes en este concurso, en el que también se han dibujado el puente romano y el logotipo de Córdoba 2016.

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La actividad estuvo organizada por un grupo de alumnos de grado superior de Producción de Audiovisuales, Radio y Espectáculos del Instituto Ángel de Saavedra, con el respaldo de la Oficina de la Capitalidad. Una de las responsables, Julia Lapuebla, estaba ayer exultante por el resultado de la celebración. "Han venido a visitarnos varios colegios y muchos jóvenes han participado en la sorpresa que teníamos guardada, un flashmob, una coreografía organizada en la que se va sumando cada vez más gente", explicó.

Y es que toda la jornada artística, que duró en torno a tres horas y media, estuvo acompañada de música pinchada por dos músicos locales. Además, todos los chavales que querían podían pringarse ellos mismos de pintura para plasmar, en varios lienzos, lo que les viniera en gana. El resultado fue más bien confuso: batiburrillo de colores, dibujos y palabras.

El grafitero Fran Tomé realiza el mural de apoyo a la candidatura de Córdoba 2016.
El grafitero Fran Tomé realiza el mural de apoyo a la candidatura de Córdoba 2016.F. J. VARGAS

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