La prueba

Terapia de choque. Pep Guardiola reunió a sus jugadores el jueves a pie de campo para meterles en la sesera que de nada sirve golear al Madrid si no se remata la faena, al menos hasta que llegue el parón invernal. Fueron apenas cinco minutos, arrancados por la felicitación por el clásico, y seguidos de mensajes de precaución. "A partir de ahora el Madrid será doblemente peligroso", "Nos quedan tres partidos vitales [ante Osasuna, Real Sociedad y Espanyol; no cuenta el duelo de Champions, ya clasificados] hasta Navidad" y "el choque en el campo de Osasuna será más difícil que el clásico", azuzaba sin pausa el entrenador. Ayer, se reafirmó ante los medios. "Debemos procurar que no haya un bajón, como suele ocurrir, tras jugar ante el Madrid", argumentó. Y se centró en el compromiso de hoy en el Reyno de Navarra, duelo para el que la huelga de controladores aéreos puede afectar al equipo: "No es una prueba. Es la prueba que determinará si estamos preparados para competir por la Liga".

Por detrás está el Madrid, a dos puntos -"una distancia ridícula", para Guardiola- y dispuesto a dar guerra. Eso entiende el técnico azulgrana. "Una virtud de Mourinho es que es un animal competitivo. Hay pocos como él; ya lo ha hecho en otros equipos y eso hace al Madrid más peligroso de lo que era antes de venir al Camp Nou". Y amplió: "Al contrario que el Madrid, el Barça estaría más deprimido y triste con la derrota. Ellos son más valientes, es admirable". Unos elogios, en cualquier caso, que no escondían la satisfacción de Guardiola. "Esto no es llegar, hacer cuatro entrenamientos y a funcionar, sino que es un proceso muy largo. Aquí tenemos la gran suerte de que está instaurado y el gran pecado sería perderlo. Por eso Cruyff y Rexach, que iniciaron este modelo, son los máximos protagonistas", convino, y rechazaba ser el mejor equipo de la historia: "Cuando un partido ha acabado, pertenece a la gente. Dejemos que sean ellos los que juzguen con el tiempo".

Guardiola podrá contar con Messi para medirse a Osasuna en el Reyno. "Pamplona es el escenario que toca, con o sin nieve, muy exigente. Y es imposible que repitamos el partido del Madrid. Pero lo que no podemos hacer es perder lo que somos". Y, conforme a su librillo, remató: "Para ganar la Liga habrá que ganar una cantidad indecente de puntos. Y Osasuna es la prueba que nos pondrá en nuestro sitio".