El rap del ladrillo

Tuomas Toivonen sube al estrado. Es arquitecto, gafotas y finés, no tu típico rapero pero, ante un público que espera una conferencia, se pone a rimar en inglés con acento Kraftwerk sobre un beat de música house ("el más arquitectónico de los estilos"). "U de utopía... Corbusier sabe que la vida urbana no ocurre en los suburbios, así que los suburbios tienen que ocurrir donde la ciudad ya existe... U de utopía, U de utopía". ¿Cómo se queda el público? "No dicen nada, ellos no tienen el micrófono", apunta Toivonen con indiscutible actitud hip-hop desde su estudio NOW de Helsinki. Se puede ver en Google (buscando "Tuomas Toivonen raps").

En otra sala de conferencias de Madrid, hace unas semanas, con pinta de estrella del pop y flequillo manga, el danés Bjarke Ingels proyecta imágenes de un cómic en el que él es el protagonista. Las viñetas, que recuerdan a Sin City, de Frank Miller, explican las bambalinas de los proyectos de su estudio BIG de Conpenhague, como el pabellón de Dinamarca en la Expo de Shanghái. En los bocadillos el arquitecto/superhéroe dice cosas como: "¡Una vida sostenible no tiene porqué ser menos divertida!".

"Las charlas de arquitectura son aburridas. Hagamos partícipe al público"

El cómic se titula Yes is more, una broma de arquitectos que evoluciona sobre el famoso less is more ("menos es más") de Mies van der Rohe. "Las charlas de arquitectura pueden ser muy aburridas, especialmente para quienes no son arquitectos este universo es muy inaccesible y aparentemente irrelevante. Somos nosotros quienes debemos esforzarnos para hacer partícipe al público", explica Ingels.

"Lo difícil es popularizar algo complicado de una manera inteligente y sin trivializarlo", añade Toivonen. "El pop hace eso: hay muchas canciones de amor emocionantes y auténticas que duran tres minutos". Su vinilo, Urbanism is in the house, que salió en otoño con unas mil copias, es, en sus propias palabras, "una conferencia de arquitectura con música". Tiene temas como Less=More o Teachers, en el que, al más puro estilo Daft Punk, recita los nombres de los 36 arquitectos que más le han influenciado: "Mies in the house, Rem Koolhas is in the house", etcétera. Sus principales influencias musicales son Talking Heads ("funcionan como un estudio, un grupo de gente inteligente y creativa haciendo algo juntos"), Kraftwerk ("cada uno de sus temas es un manifiesto, su voz es la de la sociedad") y Public Enemy ("tienen la urgencia de un canal de noticias urbano").

Ninguno de los arquitectos piensa comerse el mundo con sus obras paralelas. Toivonen tuvo un grupo durante años ("ya he hecho todas las giras que quería", dice), Ingels hizo sus pinitos como ilustrador (dibujó dos novelas gráficas "que no llegaron muy lejos"). Ambos usan ahora sus otros talentos para comunicar la carrera que finalmente eligieron. "La arquitectura ocurre gracias a la colaboración y el diálogo, si no hay comunicación no hay arquitectura", dice Ingels. "Un arquitecto no es un escultor, no puede hacer nada en solitario: necesitamos transmitir nuestras ideas a un equipo, a los colaboradores, clientes, abogados, inversores, usuarios, vecinos, promotores... Nuestra habilidad para transmitir ideas es nuestro cincel". Su intención es acercar un mundo que todos habitamos pero cuestionamos poco. Un mundo en el que, según Ingels, Norman Foster sería Superman; Zaha Hadid, Edna Moda de Los Increíbles; y Mies van der Rohe, el Profesor Xavier de los X-Men. Para Toivonen, Foster sería Phil Collins; Zaha Hadid, Tom Jones; y Mies, Bach.

¿Han conseguido proyectos gracias a su disco y su cómic? "De momento, no", dice Ingels, "aunque nunca sabes de dónde puede surgir una oportunidad". Toivonen es más realista: "El rap construye en la economía del respeto, no en la del ladrillo".

Más información en www.nowarchitecture.com; Myspace.com/tuomastoivonen y www.big.dk