"Duele que no se nos tenga en cuenta"

Es jueves y, tras el entrenamiento, el técnico, Juan Carlos Garrido reúne a Santi Cazorla (Lugo de Llanera, Asturias; 1984) y Borja Valero (Madrid, 1985), los guardianes del juego del Villarreal, y les arenga ante la cita con el Barça.

EL PAÍS. ¿Les ha abroncado?

Cazorla. No. Hemos hablado del partido, de lo que cree conveniente, de que estemos convencidos de que podemos ganar si hacemos todo como hasta ahora.

Borja Valero. Garrido quiere que no renunciemos a nuestro estilo por que el rival sea el Barça. La mayoría de los equipos, cuando van al Camp Nou, lo varían, se fijan demasiado en el Barça, se meten atrás. Tenemos que quitarles la pelota y ganar con nuestras armas.

E. P. ¿Qué armas?

"Un constipado de Mourinho cubre más portadas que un gran partido nuestro"

"La clave es que el Barça no se ponga por delante. Si lo hace, juega muy a gusto"

C. Mucho balón, mucha posesión, mucho partido corto. Estamos a gusto entrenándonos así.

B. V. Esa intensidad en los rondos, las presiones, los partidillos cortos, nos hace tener esa rapidez en el campo. En Inglaterra [Borja jugó en el West Bromwich] los entrenamientos eran un poco más toscos: más de correr, nada que ver con esto. Aquí, prácticamente no hemos corrido sin balón.

C. Ni en la pretemporada. Todo va relacionado con el balón. Se te hace más ameno el trabajo.

B. V. Muchos creen que solo hay que correr para estar bien físicamente. Demostramos que no.

E. P. Garrido participa mucho en la sesión. ¿Es pesado?

C. Yo tuve la suerte de tenerlo en el filial cuando llegué. Es igual que entonces. Aprieta mucho y quiere mucha intensidad.

B. V. Hay días que uno se levanta con menos ganas y, si no estuviese metiéndote esa energía a cada momento, te relajarías. Nos hace estar enchufados.

EL PAÍS. Da la sensación de que se divierten mucho jugando.

C. El estilo y los jugadores que tenemos son de mucha calidad y el equipo disfruta.

B. V. Yo me lo paso muy bien. Tenemos la pelota y creamos ocasiones. Es mucho más divertido que estar corriendo siempre detrás de los contrarios.

EL PAÍS. Antes, con Manuel Pellegrini, se decía que el Villarreal tenía un aire sudamericano. ¿Su estilo es ahora comparable al del Barça?

C. Nuestro estilo es de juntarse mucha gente cerca del balón y tener siempre la iniciativa de juego. En ese aspecto sí queremos parecernos un poco al Barça. El Villarreal ha afianzado un estilo y la gente se identifica un poco con él.

B. V. A mí me encanta este fútbol. El tener la posesión y, sobre la base de esa posesión, intentar hacer daño al rival. El Barça lo hace a nivel altísimo y, salvando las distancias, quizás nosotros somos los que más lo intentamos después de ellos.

C. Sí, en temporadas anteriores perdíamos puntos por relajarnos en algunas fases de los partidos. Este año no está pasando eso y cometemos menos errores.

B. V. Si un equipo juega bien, se le tacha de blandito y se dice que fuera de casa no lo hace igual que en ella. Eso ha cambiado en nosotros. Jugamos con más intensidad porque en partidos muy complicados, como en Gijón o ante el Hércules, duros, con expulsiones, sacamos un punto.

C. También estamos corriendo muchísimo. Los dos jugamos muchas veces en las bandas y es una posición en la que tienes que correr. El entrenador quiere que tengamos mucho peso en el ataque y luego que ayudemos mucho al lateral. Acabo reventado.

B. V. Eso es por la edad, Santi [risas]. Yo acabo fundido.

EL PAÍS. La relación con los dos de arriba, Rossi y Nilmar, parece una sincronización de movimientos, de toque, una fiesta.

B. V. Con dos delanteros tan en forma y que se desmarcan como lo hacen, es mucho más fácil. Un pase medio regular lo convierten en bueno.

C. No solo es que tengan gol o desmarque. Pueden venir a apoyarnos y aguantan el balón perfectamente. Son superrápidos arriba y de cualquier pelota que les metas en profundidad te van a hacer una ocasión de gol.

EL PAÍS. ¿Qué se siente jugando ante el Barça?

C. La clave es que no se pongan por delante. Si lo hacen y te quieres abrir un poco al final, juegan muy a gusto.

B. V. Hay días que hagas lo que hagas, si están enchufados, es muy difícil hacerles daño.

P. ¿Tendrían nivel para jugar en el Barça?

C. ¿A quién quitas? Resulta un poco lejano jugar en el Barça hoy en día. ¡Con los jugadores que hay! Da gusto verles jugar.

B. V. Yo intentaría buscar un hueco. Estoy muy a gusto aquí, pero en el futuro nunca se sabe.

EL PAÍS. ¿Xavi e Iniesta están en otro planeta?

C. Parece que nunca les puedes quitar la pelota y que no vale la pena ni entrarles.

B. V. Tenemos que quitársela y que no se sientan a gusto.

C. Y apretarlos bien con muchas ayudas. Si no, Iniesta, en el uno contra uno, se va con facilidad y da un pase de gol. Xavi controla todo el fútbol. Tenemos que hacer que se sientan incómodos.

EL PAÍS. Para parar a Messi...

C. Es mejor que se quede tranquilo en el banquillo.

B. V. Una pistola. Es el más determinante del mundo.

EL PAÍS. ¿Les molesta que nadie cuente con ustedes?

C. Sí que duele un poco que no se nos tenga en cuenta. Pero nos dedicamos solo a lo nuestro.

B. V. Un constipado de Mourinho o Cristiano cubre más portadas que un gran partido nuestro.