Un empresario afronta dos años de cárcel por el trato a un empleado

La Fiscalía de la Audiencia Provincial de Málaga ha solicitado dos años de cárcel para el gerente y la administradora de la empresa Alimentación y Congelados Santa Gema, SL, de Alhaurín el Grande, por un delito contra los derechos de los trabajadores, al contratar a un inmigrante sin papeles, pagarle 37 euros por jornadas de nueve horas de trabajo y darle alojamiento en una "corralona de cerdos".

En su escrito de calificación, al que ha tenido acceso este periódico, el fiscal Fernando Bentabol acusa a los responsables de la empresa, José Antonio C. y María del Carmen M., de "aprovecharse de las circunstancias irregulares del trabajador" para contratarle en condiciones abusivas. Los procesados contactaron en abril de 2006 con el inmigrante, de nacionalidad paraguaya y de nombre Benigno Rubén, "con conocimiento de que carecía de permisos de trabajo y residencia en España", y lo contrataron "para realizar todo tipo de trabajos" en la empresa, situada en la pedanía de Villafranco del Guadalhorce. Su horario de trabajo era entre las 14.00 y las 23.00 horas.

Los empresarios le dieron vivienda al trabajador, según la acusación pública, "en una corralona de cerdos". Allí "vivía en un espacio mínimo, sin servicios sanitarios, sin agua, ni luz y en condiciones higiénicas inhumanas". Además, el trabajador carecía de Seguridad Social.

La fiscalía reclama para cada uno de los acusados una pena de dos años de prisión y una multa de 18.000 euros. Asimismo, pide que indemnicen al trabajador paraguayo con 2.000 euros en concepto de daños morales. Este periódico trató de contactar, sin éxito, con la empresa para recabar su versión.

El secretario provincial de CC OO, Antonio Herrera, aseguró ayer que con la crisis económica ha crecido el número de "empresarios desaprensivos" que aprovechan la "indefensión de trabajadores inmigrantes y autóctonos" para contratarlos y bajar los salarios en su sector.