Benidorm quiere imitar a Las Vegas
La Consejería de Hacienda asume la propuesta de instalar casinos en los hoteles
Benidorm pretende convertirse en una isla para el juego en territorio español, como Las Vegas en Estados Unidos, el Caribe mexicano o la República Dominicana. Estos destinos turísticos permiten la implantación de salas de juego en sus hoteles. Se trata de que los hoteles de cuatro y cinco estrellas puedan albergar minicasinos e incorporen a la amplia oferta de la ciudad un atractivo más para atraer clientes de mayor poder adquisitivo y ayudar a paliar la caída de ingresos y rentabilidad que ha conllevado el descenso del gasto medio por turista, estancado en 63 euros diarios, el nivel de 2004, lejos de los 96 euros de media española.
La iniciativa partió de la patronal hotelera Hosbec, que solicitó una reunión con la consejería de Turismo para trasladar su propuesta. El guante de los hoteleros fue cazado al vuelo por todos los partidos políticos y asociaciones empresariales de la ciudad. La respuesta final del departamento que gestiona las competencias del juego, la Consejería de Hacienda, ha sido afirmativa. El presidente de Hosbec, Toni Mayor, confirmó ayer una próxima reunión con la administración autonómica, incluyendo la Consejería de Justicia. "Hay que hacerlo y cuanto antes, porque nuestro futuro pasa por poder atraer a todo tipo de turistas", aseguró Mayor.
La instalación de los minicasinos en hoteles exige modificar el artículo 16 de la Ley 4/88 de 3 de junio del Juego de la Comunidad Valenciana, para "dotar a Benidorm de un régimen especial, en función de su aportación a la economía de la Comunidad Valenciana", según el alcalde, Agustín Navarro.
La planta de Benidorm aporta el 43% de las pernoctaciones hoteleras la Comunidad Valenciana y casi la mitad del PIB turístico valenciano. Este es el principal argumento económico que esgrime Hosbec para que se le otorgue a la ciudad un estatuto especial en materia de juego. Además, la comarca perdió el Casino del Mediterráneo, que fue cerrado en La Vila Joiosa para trasladarse al puerto de Alicante.La realidad es que últimamente todo son buenas noticias para la capital turística valenciana, que viene de mejorar en más de cinco puntos la ocupación hotelera de la segunda quincena de octubre y en 3,5 la global del mes en relación a 2009, con el 51% de turistas extranjeros.
Esta semana representantes de Benidorm se reunirán con los de Travel Trade China a petición del mayorista asiática en el marco de la feria World Travel Market de Londres, una reunión de calado, ya que, según Turespaña, en 2020 serán 20 millones de chinos los que viajen, el doble que ahora, aunque sólo 90.000 eligen España y su presencia es insignificante en la Costa Blanca.
Y desde el pasado viernes la ciudad forma parte de la Organización Mundial del Turismo (OMT), una elección que se confirmó en la reunión de su Consejo Ejecutivo, celebrado en Irán. Esto supone acceder a estudios turísticos y de mercado para que la Fundación Turística Ciudad de Benidorm seleccione sus acciones promocionales con un mejor criterio, dado que se le ha reservado una plaza en el Comité de Destinos de la OMT. El gerente de la Fundación, Moisés Jorge, destacó "la oportunidad que representa para adelantarnos en la planificación turística de los próximos años", dado que desde ahora disponen de las prospecciones que se realizan a corto, medio y largo plazo en todo el mundo.
La Fundación será la encargada de promocionar el destino. Con las aportaciones de patronos, instituciones, empresas, cajas de ahorros y particulares desgajará la marca Benidorm de otros paraguas bajo los que se promocionaba de forma indiscriminada como Costa Blanca o Comunitat Valenciana.
Ciudad deportiva
Y no solo eso, porque desde el mismo ente se ha trabajado en la creación de una macrociudad deportiva, que llamarán Sport Hall, donde se construirán seis campos de fútbol y rugby, dos campos de jockey hierba, un estadio de atletismo, dos áreas para deporte paralímpico y un circuito cerrado de ciclismo en carretera. Todo ello en una parcela municipal de casi 300.000 metros, tras un concurso de ideas para elegir el mejor diseño y con una inversión prevista de 5 millones de euros. Se trata de atraer grandes clubes, selecciones y federaciones deportivas en los meses de invierno.
