Un buen 'partido' para el BBVA
Dogus, nuevo socio del banco español, es el tercer grupo empresarial turco
Quien a buen árbol se arrima, buena sombra le cobija. El BBVA parece que ha tomado el dicho al pie de la letra y ha buscado entrar en el mercado turco de la mano del tercer mayor grupo privado del país, Dogus Holding, que cuenta con una cartera de más de 100 compañías en múltiples sectores, más de cinco millones de clientes e intereses en los Balcanes, Oriente Próximo y el norte de África.
Dogus es un enorme conglomerado familiar con sede en Estambul. Su presidente, Ferit Sahenk, hijo del fundador, controla tanto la directiva del grupo como la de Garanti Bank, un 24,9 % de cuyas acciones pertenece desde el lunes pasado a BBVA por 4.200 millones de euros. Considerado uno de los hombres más ricos y poderosos de Turquía, es también el presidente del Consejo Empresarial Turquía-EE UU, así como miembro del Consejo de Relaciones exteriores de Turquía. Formado en el Boston College y en Harvard, está casado con una estadounidense.
Garanti, segundo banco privado del país, tiene activos de 46.000 millones
Turquía es una economía en expansión poco bancarizada
El conglomerado cuenta con más de 100 empresas en múltiples sectores
Ferit Sahenk, hijo del fundador, es uno de los hombres más ricos del país
El emporio familiar nació como una compañía constructora en los años cincuenta, la época dorada para los negocios en Turquía. El afán de los políticos turcos por crear una burguesía industrial, en lo que por aquel entonces era un país eminentemente agrícola, llevó al Gobierno a apoyar a una incipiente élite empresarial a través de contratos estatales, subsidios y exenciones fiscales. Las políticas de estímulo propiciaron el rápido crecimiento de varios conglomerados familiares, como Sabanci, Koç, Dohan o el propio Dogus, pero también crearon una dependencia crónica entre el mundo de los negocios y de la política que se perpetúa hoy en día y que está en el origen de gran parte de la corrupción existente en el país.
Un mercado yermo y los tratos de favor del Gobierno facilitaron la diversificación de Dogus, que pasó de construir carreteras, puertos y hospitales a invertir en turismo en la década de los sesenta y a aventurarse en la banca llegados los setenta. El sector de las finanzas presenta actualmente el 70% del volumen de negocio del grupo. Garanti Bank es el segundo mayor banco privado turco por activos, que ascienden a 46.000 millones de euros.
Además, la cartera de Dogus abarca otros sectores, como el inmobiliario, el energético o el automovilístico, en el que representa a 15 marcas internacionales, entre ellas
Audi, Volkswagen, Lamborghini,
SEAT o Porsche. Asimismo, desde 2000 es uno de los grupos mediáticos más importantes del país, con varios canales de televisión y radio y publicaciones escritas, y cuenta con su propia universidad, Dogus Universitesi, en Estambul.
Para entender el peso de holdings como Dogus en Turquía, el profesor Cengir Aktar, de la Universidad de Bahçesehir, aporta un dato: "Los tres mayores conglomerados de Turquía -Sabanci, Koç y Dogus- producen más de la mitad del PIB de todo el país". Esto se traduce, según Aktar, en una gran influencia de las élites económicas sobre la política interna y externa turca. Y es que parte de la nueva política exterior de Turquía, el llamado neotomanismo, se asienta en los importantes lazos económicos que estos holdings familiares han creado con los países de su entorno.
En el grupo Dogus, la rama constructora mantiene una fuerte presencia en Ucrania, donde participa en la construcción de puentes y aeropuertos, o Bulgaria, con el proyecto de la ampliación del metro de Sofía. Pero también tiene intereses en Marruecos -construcción de la autopista entre Argana y Amskroud- y en Libia.
El crecimiento y la expansión del grupo han sido constantes desde su creación. Con la llegada de Ferit Sahenk a la presidencia en 2001, tras la muerte de su padre, el grupo ha conseguido posicionarse a la cabeza de los negocios del país, tan solo superado por Sabanci y Koç. Además, Sahenk puede presumir de capitanear varias de las operaciones más importantes de las finanzas turcas de la última década. La primera, en 2004, con la venta de una cuarta parte de Garanti Bank a
General Electric por un valor de 1.000 millones de euros. La operación constituyó un importante paso hacia la liberalización del sector bancario turco, gravemente afectado por la crisis de 2001. La segunda es la actual entrada de BBVA en el mercado turco mediante la compra del paquete de acciones de Garanti. Es la segunda mayor venta de la historia de país, después de la privatización de la compañía de telefonía Turk Telekom por 4.600 millones de euros en 2005.
En esta línea, el Ministro de Economía Turco, Alí Babacan, definió esta semana, durante una conferencia organizada por The Economist en Estambul, la privatización de la economía turca, especialmente de los bancos públicos, como "una de las prioridades de la agenda política del país". Para Murat Yulek, director general de Servicios de Asesoramiento de Pglobal, Turquía es una economía en expansión, con una previsión de crecimiento buena -del 6,8% para este año- y en general poco bancarizada, lo que la convierte en un gran mercado para los servicios financieros. "Hay que llegar pronto si se quiere repartir el pastel", apunta.
Por su parte, Farit Sahenk anunció el pasado miércoles su intención de usar los ingresos de la venta de las acciones de Garanti para financiar fusiones y adquisiciones, con el fin de "reforzar la posición de Garanti dentro del sector bancario turco e internacional". Además, un porcentaje de la venta, 1.483 millones de euros, será invertido en el sector energético, que en Turquía se encuentra en pleno proceso de liberalización, con un especial énfasis en la construcción de plantas hidroeléctricas. "La energía es nuestra estrategia de futuro", explicó el presidente de Dogus, que actualmente posee un 30,5 % del Garanti Bank y participaciones en dos de las mayores centrales hidroeléctricas del país.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.