Los cristianos de base piden que la Iglesia pague la visita del Papa

Los colectivos cristianos de base hicieron ayer pública en Santiago y en Barcelona una carta abierta dirigida a Benedicto XVI en la que piden que sea la propia Iglesia, y no el dinero público a través del Gobierno central y la Xunta, quien corra con los gastos de la visita del Papa a estas dos localidades a principios de noviembre. Recuerdan que España es un "Estado aconfesional y plural" y que, por tanto, la Iglesia católica debe renunciar a sus "privilegios" frente a las otras creencias y opciones de vida.

También sugieren a Ratzinger que tenga en cuenta que visita dos comunidades con lengua y cultura propias, y que en esta visita debería respetar y afianzar las "singularidades" que también existen en materia religiosa. El Papa y la jerarquía eclesiástica, además, deberían tener presente "el momento de crisis" y "las dificultades que están pasando muchas personas", y en vez de "dar pie a críticas" con el coste de los fastos y su proximidad a los poderosos, tendrían que "recuperar la voz profética de la Iglesia para denunciar las injusticias sociales".

Los portavoces del acto en el que se presentó la carta al Papa, representantes de Redes Cristiás, además de Somos Igrexa, Irimia, Vangarda Obreira y Crentes Galegos (el último encuentro que celebraron congregó a 4.000 personas en Galicia), aseguran que actualmente existe "mucho distanciamiento" entre ellos y la jerarquía y que no tienen esperanzas puestas en una visita tan "fugaz y mediática", incapaz de repercutir en la renovación de la Iglesia.