Las Fallas de Especial quieren ser evento y piden una mejor fiscalidad

Son diez fallas pero mueven 2.800.000 euros. Ese fue el presupuesto que tuvieron en 2010. Para la próxima semana grande valenciana, tendrán entre un 15% y un 20% menos. Ahora, desde la Federación de la que forman parte, se lanzan a la conquista de la financiación privada, conscientes, como dijo ayer su presidenta "de la nueva situación económica". Laura Cano explicó que el sector sabe de las limitaciones de las administraciones, especialmente del ayuntamiento, que subvencionaba hasta ahora el 25% de los monumentos, y "queremos dar un paso adelante, dar un cambio de rumbo, un impulso económico que nos haga más independientes, con una financiación más estable". Para conquistar a los inversores privados, las fallas más caras de la ciudad apuestan por un cambio legislativo que facilite que las empresas que pongan dinero en una falla de Especial se vean beneficiadas por la Ley de Mecenazgo. Y, además, piden a la administración autonómica que, en el tramo fiscal que les corresponde, aplique el máximo de beneficios a los inversores privados. La presidenta de la Federación de Fallas de Especial reclamó que las fallas a las que representa sean consideradas como "gran Evento", como "la Fórmula 1 o la Copa del América", afirmó.

Cano presentó ayer un Plan Estratégico, acompañada de la mayoría de presidentes de las comisiones de la sección Especial y del concejal de Fiestas, Félix Crespo, quien aseguró que el recorte en la contribución del consistorio a la fiesta es inevitable, aunque no dio cifras. Otras fuentes apuntaron a que inicialmente ese porcentaje descendía del 25% al 15%, pero que finalmente parece que se quedará en el 20%, amén de las reducciones de las ayudas a la iluminación, por ejemplo.

Según Cano, "el objetivo es dar carpetazo a la situación tradicional de dependencia del ayuntamiento y dar entrada a la inversión privada, dando valor a la marca Federación de Fallas de la Sección Especial".

¿Qué se proponen? Además de no renunciar a la contribución pública y lograr una fiscalidad favorable, hacer valer el millón de visitantes a las diez comisiones durante el año pasado. Su objetivo es comercializar espacios y tiempos (con la creación de paquetes turísticos para empresas, para agencias, ofrecer tratamiento VIP); comercializar espacios comunes a las diez fallas de Especial (banderolas, pantallas, material impreso común); convocar noches temáticas para una empresa que financie la fiesta (como la noche de una determinada bodega); y vender todo tipo de productos alusivos a la fiesta fallera. Todo ello, según explicó Cano, funcionaría como una caja única que se repartiría después de forma equitativa a cada una de las comisiones de la Federación.

Laura Cano aclaró que no pretenden ser "ni un gueto ni un club selecto ni estar al margen de la Junta Central Fallera". Su primer objetivo en el Plan Estratégico es amortiguar el impacto del descenso de los patrocinios tradicionales, que ya tuvo sus efectos en las dos pasadas ediciones, y la drástica reducción del precio máximo del monumento (que no puede pasar de 250.000 euros cuando lo ha habido de casi un millón de euros). Según Cano, "somos una de las mejores ofertas y posibilidades de generar riqueza".