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Reportaje:Dinero & inversiones

¿Qué me ofrecen por mi dinero?

Llega el otoño y el escaparate se llena de productos financieros para todos los perfiles

Cualquiera que tenga dinero con el que poder ahorrar o invertir -que son dos opciones algo distintas, ya que la segunda incorpora riesgo- puede entrar en su entidad financiera o buscar en su página web y hacer alguna de estas preguntas: ¿qué me ofrecen por mi dinero, hoy por hoy? Desgraciadamente, en algún caso es probable que, incluso sin solicitar ninguna información adicional sobre su perfil inversor, simplemente traten de venderle el producto financiero que en ese momento tengan "en promoción", porque "es estupendo y novedoso"; "porque no perderá nunca dinero"; "porque puede llegar a ganar hasta un..."; "porque, además, le regalamos..."; "porque...".

No hay que llamarse a engaño, las oficinas bancarias (y las de las cajas) han de cumplir los objetivos de captación de dinero que les imponen sus correspondientes entidades. Y precisamente porque hay que ser consciente de ello, porque son muchas las alternativas de inversión o ahorro entre las que se puede elegir; porque no pasa nada por tener la hipoteca en un banco y suscribir fondos de inversión o de pensiones de otro, o incluso comprar y vender acciones o renta fija a través de un tercero; porque lo que es bueno para uno puede que no lo sea para otro, aunque solo sea una cuestión de plazos... hay que tomarse un tiempo antes de decidir.

Con la inflación actual los depósitos siguen siendo una opción interesante
Cuidado con los planes de pensiones: las diferencias entre productos es enorme

El ahorrador/inversor debe realizar antes una serie de tareas. Para la compra de un producto financiero hay que seguir una serie de pautas: comparar alternativas, tener claro el objetivo de la inversión y su duración, seleccionar productos que se entiendan (hasta la letra pequeña), no perder de vista las comisiones y los gastos asociados; considerar que habrá que pagar impuestos (antes o después), no dejarse llevar por el efecto retrovisor (rentabilidades pasadas no son garantía de futuro), tener claro que al asumir riesgos se puede ganar más, pero también perder... En estos momentos el escaparate financiero ofrece una variada lista de alternativas:

- Depósitos tradicionales. Viven una época de esplendor. Las entidades necesitan dinero y están dispuestas a remunerarlo más o menos adecuadamente -los más altos rendimientos se colocan, al menos por ahora, entre el 4% y el 5%, según plazos y exigencias de vinculación financiera adicionales- porque recurrir a otros prestamistas puede llegar a resultarles aún más caro. Se dirigen al ahorrador más que al inversor, al ser el riesgo prácticamente nulo. Con los niveles actuales de inflación permiten mantener el capital y obtener un sobrerrédito que se adapta bien al perfil más conservador.

- Depósitos especiales. Su rentabilidad final pasa por la que puede generar otro producto de inversión (llámense acciones, fondos de inversión...), cualquier evento que se considere atractivo (véase Liga de Campeones), la suscripción de un plan de pensiones... Hay que estar atento no solo a los plazos, sino también a los máximos de rentabilidad establecidos. También se pueden encontrar depósitos en dólares con remuneraciones de salida mínimas, pero, al jugar con el riesgo divisa, con la posibilidad de obtener plusvalías adicionales si el euro pierde posiciones.

- Fondos de inversión. Muchos, muchísimos (más de un millar, nacionales) para elegir entre los que ya se comercializan. Es importante analizar historiales de rentabilidad. Monetarios y renta fija, en general, están de capa caída. La renta variable europea en sus distintas modalidades vive una situación mixta. Los de mercados emergentes, por el momento, triunfan: sus economías, dicen los expertos, son las que más pueden crecer en el futuro, entre otras razones por puras cuestiones demográficas. Los nuevos fondos que están saliendo (y previsiblemente los que lo harán a corto plazo), mayoritariamente garantizados con rendimientos vinculados a los mercados bursátiles. Existen ofertas si se traspasa el dinero de una entidad a otra, pero solo deben ser dignas de tener en cuenta si se tiene claro que se quiere invertir en alguno de los fondos incluidos en la promoción.

- Seguros de ahorro, unit linked. Son productos con el capital parcial o totalmente asegurado, plazos más largos, rentabilidades en función de acciones, índices, divisas. Atención a los topes máximos de rendimientos.

- Planes de pensiones. Llega la época de estos productos. Por sus ventajas fiscales y porque la futura reforma de las pensiones está todos los días en los medios de comunicación. También hay mucho donde elegir y conviene hacerlo. Es verdad que son productos a largo plazo, pero eso no significa que una vez tomada una decisión haya que mantenerla. Las diferencias de rentabilidad entre unos y otros son enormes.

Fachada de una de las oficinas de Banco Popular.
Fachada de una de las oficinas de Banco Popular.BERNARDO PÉREZ

Algunos productos donde elegir

- Bancaja Garantizado 13 a 4 años. Rendimiento variable ligado al comportamiento del índice bursátil europeo Euro Stoxx 50 y el índice de renta variable estadounidense S&P 500. Capital asegurado, con la posibilidad de obtener una rentabilidad adicional máxima del 5,45% anual consolidado. Mínimo: 100 euros.

- Seguros Unit Linked Plan Inversión 11 y Plan Inversión 12 de Barclays. Ambos seguros tienen una duración de dos años y diez meses, con una protección del capital invertido del 80%, y su rentabilidad está ligada a la evolución de tres valores europeos. Si las acciones siempre superan o igualan su valor inicial se puede obtener un máximo del 36% de rentabilidad en el primer caso y del 30% en el segundo.

- Confianza 4,5 de Mapfre Vida. Seguro de Ahorro que ofrece, simultáneamente, una rentabilidad garantizada a un año y otra adicional a cuatro años que está vinculada a la apreciación del dólar frente al euro (hasta un 20% acumulado).

- Plan Global Emergente de Citibank. Plan de pensiones mixto de renta variable emergente (entre un 25% y un 75% de su patrimonio) y renta fija emergente. Los activos de países emergentes suponen un mínimo del 50% del patrimonio del fondo.

- Depósito x2 de Bankinter. Un depósito más otro producto de inversión. Si la rentabilidad del producto asociado fuese inferior o igual a 2,5%, el depósito se remunera al 5%; entre 2,5 % y 5%, al doble,

y superior al 5%, con el 10%. Plazo: un mes.

- Depósito Doble Campeón de Activo Bank. Con un doble vencimiento, a 9 y 36 meses, que combina un tipo de interés fijo del 5,5% (por el 50% de la inversión a 9 meses) con las expectativas de revalorización de los índices bursátiles S&P 500 y Euro Stoxx 50 (máximo del 19,81% a 36 meses). Además, si el Barcelona, Real Madrid o Valencia ganan la Liga de Campeones de 2011, la rentabilidad llega hasta un 7,5%.

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