"Suerte que nadie fue al hospital"

"Yo sólo hablo de mi césped", aclaró Mourinho, cuando, nada más pisar la sala de prensa del Ciutat de València, descubrió que había gente esperándole para preguntarle por esos temas que él ha puesto en el foro. No hubo caso. El barrio de Orriols será recordado como el primer lugar en el que, tras un partido, José Mourinho suspendió su ciclo de excusas. Tal vez el hombre no tenía previsto empatar a cero ante el Levante. Es probable que no hubiese preparado un discurso. Lo cierto es que asombró a su audiencia, esta vez, por su comedimiento. "No marcamos", declaró, sin imaginar otra explicación, "y, ya se sabe, para ganar hace falta meter goles".

La comparación con la temporada pasada deja al descubierto una caída en picado de la eficacia goleadora. En la Liga pasada, con Manuel Pellegrini al frente, el Madrid marcó 16 goles y encajó dos en las primeras cinco jornadas. Ahora acumula seis goles a favor y uno en contra. Mourinho se congratula de haber logrado establecer un orden defensivo sólido. Pero el año pasado el Madrid también se defendió con rigor.

Con Pellegrini, el equipo marcó 16 goles hasta la 5ª jornada. Ahora lleva seis

Arbeloa: "En defensa nos implicamos todos. Tenemos que hacer lo mismo arriba"

"No es normal que el equipo necesite tantas ocasiones, y eso nos ha sucedido ya varias veces", lamentó Mourinho. "Quizá el de San Sebastián fue el único encuentro en el que marcamos dos goles sin tantas ocasiones, y obviamente eso me preocupa, porque hay que marcar para ganar y ya hemos perdido unos cuantos puntos por este motivo".

"La calidad de los jugadores no es un problema", continuó, antes de confesar que espera más de sus delanteros. "Normalmente, suelen marcar muchos goles, y esa es mi única preocupación ahora".

A Mourinho le preguntaron por las alternativas que tiene en su banquillo para introducir cambios. En el aire flota la posibilidad de sentar a Higuaín, responsable de definir las jugadas, o a Di María, sin oficio para aportar cosas en la elaboración. El entrenador dejó entrever que en Auxerre, en el partido de Liga de Campeones del próximo martes, presentará una nueva alineación. Lo dijo dando un rodeo. "Si cambiásemos algo en el once a lo mejor no crearíamos tantas ocasiones, o quizá crearíamos dos y las transformaríamos", reflexionó, en un circunloquio. "Lo más complicado de conseguir es el equilibrio. Y lo tenemos. Casillas no ha tenido ni una situación difícil en todo el partido. Somos ordenados y creamos ocasiones. Los goles son una cuestión de rachas y de confianza. Yo no voy a criticar a mis jugadores por fallar delante del portero. Les daré confianza. Pero seguramente hay alguien que está trabajando bien y espera su oportunidad".

Mourinho confesó que en el vestuario se había mostrado comprensivo con sus jugadores. "No he dicho ninguna palabra negativa a mis jugadores", informó Mourinho. "Creo que jugaron concentrados, crearon juego y lucharon hasta el final". Ya concluía la conferencia de prensa cuando Mourinho no pudo resistirse a formular una declaración provocativa. El técnico ironizó sobre los lamentos de algunos jugadores del Levante, que se quejaron de las entradas de las madridistas. En concreto, se refirió a Del Horno, que sufrió un plantillazo de Cristiano y se retorció de dolor. "Pensé que alguno iba a terminar en el hospital", dijo Mourinho, que entrenó a Del Horno en el Chelsea. "Por suerte nadie fue al hospital".

Los jugadores se mostraron preocupados. Arbeloa terminó el partido y se confesó en Canal+. "Defensivamente estamos todos muy implicados. Ahora tenemos que hacer lo mismo arriba. Nos ha faltado claridad y precisión para superar la defensa del Levante, que se ha juntado muy bien y nos ha dejado muy pocos espacios. Ahora estamos en un problema porque si esta Liga va a ser como la del año pasado cualquier cosa que no sea ganar estos partidos no nos sirve".

Arbeloa expresó su inquietud ante la falta de un plan del Madrid cuando tiene el balón. Higuaín habló desde la frustración del goleador: "Antes entraba todo y ahora nos cuesta mucho más convertir las ocasiones".

Marcelo pidió lo que el Bernabéu se resiste a darle al equipo: paciencia. "No encontramos el gol", dijo el lateral brasileño, "pero defendimos bien y arriba creamos muchas ocasiones. Ahora hay que tener un poco de paciencia. Vamos poquito a poco".