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El otoño será normal en lluvias y temperaturas

No hay ningún indicio en los modelos sobre los que trabaja la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) que haga pensar a sus técnicos que el próximo otoño -que empieza mañana a las tres de la madrugada- será especialmente frío o lluvioso.

Con las cautelas que conllevan las predicciones de estaciones -mucho más imprecisas que las referidas a un menor plazo de tiempo- el delegado territorial de Aemet, Jorge Tamayo, indicó ayer que la "estimación genérica" del otoño apunta a que será normal en cuanto a temperaturas y precipitaciones. Tamayo advirtió de que este tipo de predicciones tiene un mayor grado de fiabilidad en las estaciones meteorológicamente más estables, como el verano o el invierno, que en el otoño o la primavera.

Tamayo, junto al jefe del grupo de predicción de Aemet en Valencia, Víctor Alcover, y el jefe de climatología, José Ángel Núñez, recordaron en una comparecencia conjunta que el fenómeno meteorológico conocido como gota fría requiere la confluencia de distintos factores. No es solo una elevada temperatura del agua del mar -o superior a los 18 o 20 grados-, sino la presencia también de una bolsa de aire frío en altura y la entrada de viento de levante cargado de humedad. Además, apuntaron que no existe la posibilidad de determinar a medio plazo la coincidencia de estos factores, aunque lo más frecuente es que se den en otoño.

Verano variable

La Aemet ofreció ayer, además, un resumen del verano, que tuvo una temperatura superior en 0,7 grados a la media de referencia (1971-2000) y una precipitación un 35% superior. Tamayo concretó que mientras junio tuvo temperaturas "suaves" y julio fue "térmicamente estable", el mes de agosto fue el "más variable". El día 13 de agosto fue uno de los más fríos, con valores por debajo de los 15 grados en el interior, mientras el día 27 del mismo mes se alcanzaron máximas históricas que en Valencia, llegaron a los 43 grados, temperatura que no se registraba desde 1859.

La ola de calor de ese día, con entrada de vientos de poniente, disparó las temperaturas por encima de los 40 grados también en Crevillent, Elche, Xàtiva o Nules. El máximo absoluto fue Carcaixent, donde se llegó a los 45,1 grados, el valor más alto registrado en España este verano.

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