_
_
_
_

La patronal vasca confirma el "goteo" de cartas de extorsión

Un artefacto estalla en un polígono industrial de Vitoria

El secretario general de la patronal vasca Confebask, José Guillermo Zubia, confirmó ayer que la tregua de ETA no ha supuesto un antes y un después en la extorsión que practica la banda. Empresarios y profesionales han seguido recibiendo en los últimos meses "un goteo exactamente igual que en épocas anteriores" de cartas de extorsión, aseguró ayer en Radio Euskadi. El comunicado con el que ETA anunció el pasado día 5 el alto el fuego sostenía que la banda decidió "hace algunos meses" no realizar "acciones armadas ofensivas", pero no hablaba para nada del chantaje.

Zubia consideró la situación "aberrante", pese a que no haya atentados, porque pone sobre la mesa que siguen existiendo ciudadanos amenazados. "Aquí no caben clasificaciones de ningún tipo" entre unos amenazados y otros, argumentó.

Más información
López reclama hechos que avalen la apuesta 'abertzale' por la política
LA GUARDIA CIVIL REGISTRA LA 'HERRIKO TABERNA' DE EIBAR
Ezker Batua y 14 eurodiputados piden que sea legalizada Batasuna

El secretario general de la patronal dijo tras el anuncio etarra que "esperanza hay siempre y, fundamentalmente, cuando hay algo que implica un cierto alivio, que es esa confusa o difusa expresión de las acciones ofensivas". Pero colocó en el otro lado de la balanza la amenaza permanente y el chantaje a los empresarios.

Zubia hizo estas declaraciones apenas unas horas después de que estallase un artefacto de fabricación casera de los habitualmente usados en los actos de kale borroka junto al Centro Municipal de Empresas sito en el polígono industrial de Júndiz, en Vitoria. El ataque se produjo hacia la 1.20 de ayer. El artefacto, colocado en la fachada de la primera planta del edificio, estaba compuesto por una bombona de camping gas, varios aerosoles con líquido inflamable y un iniciador pirotécnico, según informó la Ertzaintza. La bombona de camping gas no llegó a detonar, lo que evitó que los daños fuesen mayores. Finalmente, se limitaron al ennegrecimiento de la fachada y la rotura de los cristales del edificio.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_