"Nos hemos equivocado"

Monza es el templo de la velocidad, el circuito con la media más alta de entre los 19 que configuran el calendario de este año (257,3 kilómetros por hora) y una pista en la que los pilotos circulan el 75% de la vuelta machacando el pedal del acelerador. Con todo eso, ni siquiera aquí el monoplaza más veloz es el más eficaz. De ser así, el gran favorito para llevarse la victoria sería Jaime Alguersuari, que ayer alcanzó una máxima de 348,7 km/hora, y tampoco debería irle mal a Lewis Hamilton (344,4 km/h), el tercero en este apartado. Aunque el cabreo que llevaba el británico al terminar la clasificatoria, donde solo pudo asegurarse la quinta plaza de la parrilla, desmiente el extremo anterior. Jenson Button, su compañero en McLaren, concluyó a una sola décima de Fernando Alonso y arrancará el segundo, a pesar de que su coche fue el tercero más lento en términos de velocidad punta (329,5 km/h). La obsesión por este parámetro llevó a Hamilton y a su equipo a jugársela, pero la apuesta no salió tan bien como habían planeado.

El británico fue el único de los candidatos al título que prescindió del sistema

Para tratar de ganar prestaciones en las rectas, McLaren decidió prescindir del conducto f en el bólido del líder del Mundial, el único de los cinco contendientes que luchan por el título que hoy deberá comenzar la carrera sin este sistema, a menos que quiera hacerlo desde el carril de los talleres. La velocidad es un aspecto a tener muy en cuenta en Monza, pero tampoco debe descuidarse del todo la carga aerodinámica del monoplaza si uno no quiere verse a bordo de un caballo desbocado.

"No emplear el conducto f ha sido determinante en esta clasificación, estoy decepcionado", convino Hamilton. "Decidimos tomar parte en la clasificación con el nivel de carga aerodinámica más baja posible, y eso nos llevo a prescindir de él, pero eso hizo que el coche se moviera demasiado en todos lados porque no tenía downforce (la carga aerodinámica que empuja el monoplaza hacia el asfalto)", lamentó el corredor de Tewin. "Hemos elegido mal, nos hemos equivocado", certificó.

La configuración de la parrilla no deja de ser un poco sorprendente. No porque Alonso lograra la pole y ni siquiera porque no lo hiciera alguno de los dos Red Bull (acumulan 12 de 14 posibles). Lo más llamativo es que la superioridad que la mayoría de pilotos otorgaba a McLaren parece haberse volatilizado. "No creo que tengamos ventaja. Espero ser más rápido que los demás en rectas para así poder acercarme a los de delante. Lo que pasa es que ellos [al tener mayor carga aerodinámica] irán más rápido en las curvas, así que las cosas están equilibradas", matizó el campeón del mundo de hace dos años. Una cosa parece clara: con la agresividad que caracteriza a Hamilton y su facilidad para lanzarse a adelantar, la carrera puede ser movidita.