Polémica sobre la actuación policial en A Cañiza

Ex convictos por asaltos a bancos y robos con violencia, vigueses y compañeros de prisión en A Lama. Este es el perfil de los supuestos integrantes de la banda que el pasado martes, en un asalto a la sucursal de Caixa Galicia de A Cañiza acabó con la vida del guardia civil Miguel Jorge Piñeiro, acribillado a tiros cuando intentaba frustrar el atraco. Tras los ingresos en prisión de José Vidal Casar, autor confeso de los disparos, y de José Ángel Martins Mendoza, ordenado por el juez a última hora de ayer, las fuerzas de seguridad tratan de localizar a otros dos implicados.

Mientras se va cerrando el cerco en torno al tercer implicado, F.C.P., presuntamente responsable de la vigilancia de la zona y de preparar la huida de los asaltantes, las fuerzas de seguridad buscan a un posible nuevo cómplice, S.P.P., de quien no descartan que pudiera estar relacionado también con el asalto. De momento, la búsqueda de este posible integrante de la banda tiene como único objetivo tomarle declaración.

Este nuevo sospechoso, de 44 años, es natural y vecino de Vigo y cuenta, como el resto de la banda, con un amplio historial delictivo - robos con violencia, y asaltos a entidades bancarias- iniciado en los años ochenta. La complicidad de S.P.P. con el resto de los presuntos implicados en el atraco vendría dada no sólo por la zona de residencia, en Vigo, sino por el hecho de que coincidió cumpliendo condena con los hermanos Martins en la cárcel de Topas (Salamanca) y posteriormente en la de A Lama, en donde también estaba ingresado José Vilar Casal. Los hermanos Martins integraron, en los años 90, una de las bandas más peligrosas de Vigo.

Mientras, ayer se suscitó la controversia alrededor del atraco de A Cañiza, después de que el diario El Mundo publicase que la policía tuvo conocimiento del atraco y se lo comunicó a mandos de la Guardia Civil, que no avisaron a los agentes que acudieron a la sucursal una vez que saltó la alarma, cuando los asaltantes hacían el butrón. Según la información, los geos llegaron a controlar una sucursal bancaria de Vigo creyendo que el atraco se iba a producir allí.

La Unión de Guardias Civiles aseguró ayer en un comunicado que ha podido corroborar esa información con "miembros de la policía nacional" y amenazó con emprender acciones judiciales contra los mandos del instituto armado en Pontevedra.