La mayor parte del suelo para empresas del 'puerto seco' vigués está inutilizable

Las catas realizadas hace unas semanas por encargo de Mitsubishi con vistas a construir una fábrica de baterías para coches eléctricos en la Plataforma Logístico Industrial Salvaterra-As Neves (Plisan) descartarán para ese fin los terrenos pertenecientes a la Autoridad Portuaria de Vigo (61% del polígono, 236 hectáreas del total inicial de 419 hectáreas), según las fuentes consultadas por este periódico.La Autoridad Portuaria no ha consolidado aún el suelo que ocupaban las balsas de lodos utilizadas por las empresas mineras, pese a existir un proyecto al efecto desde 2005, y que "invaden" las cuatro parcelas teóricamente disponibles en esa parte del polígono.

La reciente anulación por el Tribunal Supremo del plan sectorial que propició la creación del polígono tampoco facilita la disponibilidad de suelo para las empresas en el mismo. La Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras somete este mes a información pública el Documento de inicio a la evaluación ambiental estratégica de la modificación puntual del proyecto sectorial, fase previa a la creación de un nuevo polígono, que inicialmente tendrá 106 hectáreas menos que el anulado por la sentencia del Tribunal Supremo por ocupar unas 70 hectáreas de suelo de especial protección forestal. Esta nueva disposición obligará, además, a un redistribución de suelos entre los tres promotores del polígono.El grueso del terreno afectado por la sentencia pertenece a Zona Franca, titular hasta ese momento del 21% del suelo de la Plisan (87 hectáreas antes del fallo judicial; el resto, 18%, 75 hectáreas, corresponde a la Xunta). Pero las antiguas balsas de lodos están enteramente en suelo de la Autoridad Portuaria.

El proyecto constructivo de "consolidación de las balsas de lodos en el ámbito de la Plisan", realizado por la consultora Gocsa, cifró la superficie ocupada por esas balsas, originadas por el lavado de áridos de las empresas mineras que actuaban en la zona, en unos 350.000 metros cuadrados, que albergan en torno a 1,5 millones de metros cúbicos de lodos y, consecuentemente, no reúnen condiciones para la edificación.

Para solventarlo, Gocsa propuso consolidarlos por el sistema denominado "precarga", colocando sobre ellos una sobrecarga temporal de tierras que facilitara su drenaje y compacidad. Este sistema reduciría el volumen del suelo al hacer fluir el agua contenida en los lodos y era especialmente factible por la gran acumulación de tierras, unos 10 millones de metros cúbicos, generado en la explanación del polígono, aunque la consultora no aseguraba el éxito al 100% de su proyecto. En todo caso, el sistema, para ser eficaz, debería estar activo durante algo más de un año. Pero ni siquiera se ensayó. Ni la precarga ni ningún otro sistema.

"Estaba previsto consolidar esos suelos a continuación de la urbanización que teníamos en marcha y en la que invertimos 32 millones de euros", indica un ex alto cargo de la Xunta con el bipartito, que a su vez resta importancia a la subsistencia de las balsas de lodos "porque los de Mitsubishi, si quieren instalarse aquí, tienen mucho suelo disponible dentro de la Plisan". Cada vez menos, cabe precisar, entre otras razones, por la sentencia del Tribunal Supremo, que anuló en junio el plan sectorial.

La extensión de la protección adoptada por la Consellería de Medio Ambiente, Transportes e Infraestructuras a 106 hectáreas representa la cuarta parte de la superficie original del polígono. Además, de las 236 hectáreas correspondientes hasta ahora a la Autoridad Portuaria, estaban teóricamente disponibles sólo 11,2 hectáreas en cuatro parcelas, aún sin urbanizar. Pero tampoco, por las razones antedichas, están disponibles para ser utilizadas por las empresas que deseen instalarse en la zona. Con todo lo cual, hoy estaríamos ante una reducción de unas 300 hectáreas en el total de la superficie utilizable en el polígono, unas 119 hectáreas, por tanto, en las que se confía que Mitsubishi encuentre el suelo para su fábrica, ya que sólo precisa 12,5 hectáreas.

Pese a esta abundancia de terreno inútil en la Plisan, los desechos generados por la construcción del enlace del polígono con la autovía Rías Baixas se están depositando en una parcela de 15 hectáreas colindante al puerto seco y perteneciente a la parroquia de Fiolledo-Salvaterra, tal vez porque ya fue arrasada en las anteriores operaciones para la construcción de la Plisan aunque figura como zona de especial protección forestal, al igual que las 70 hectáreas señaladas por el Tribunal Supremo.