Los conservadores amplían su oferta de candidatos para ganar el TSJ

La tercera parece ser la definitiva convocatoria para sustituir a Juan Luis de la Rúa al frente del Tribunal Superior de Justicia (TSJ). El 23 de septiembre el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), que hasta ahora ha consumido sin posibilidad de acuerdo dos convocatorias, elegirá presidente del TSJ valenciano. Así lo aseguran desde el Consejo. "Tiene que salir de ese pleno", asegura uno de sus miembros. En ese mismo pleno, se eligen los presidentes de TSJ de Canarias, Castilla-León, Castilla-La Mancha, Cataluña, Andalucía, Valencia y una vacante de la sala segunda del Tribunal Supremo.

Pedro Castellano, ex presidente de la Audiencia de Valencia, parte como apuesta única de los conservadores y como posible vencedor, a la tercera. Pero, por si acaso, la Asociación Profesional de la Magistratura (APM) presenta otros dos candidatos, nuevos en la contienda: José Madaria, que está al frente de la sección de Elche; y Pilar de la Oliva, titular del Juzgado de Instrucción 10 de Valencia. Además, se presentan Francisco José Pérez Navarro, de Jueces para la Democracia (JpD), recientemente nombrado presidente de la sala de Lo Social, y Javier Lluch, también de esa sala, independiente.

Entre la anterior convocatoria y ésta, han caído siete aspirantes

Los progresistas pierden a su mejor aspirante y no presentan recambio

El próximo 15 de septiembre los candidatos comparecerán ante la comisión de calificación para exponer su proyecto. Esa comisión propondrá una terna al pleno. Entre la pasada convocatoria, en junio, y la que ya se ha puesto en marcha han caído siete candidatos, entre ellos, Mercedes Boronat, la apuesta de los progresistas, ganadora en las dos ocasiones anteriores en votos a Castellano pero sin lograr alcanzar los 13 necesarios, que obligaban a un acuerdo entre los dos bloques mayoritarios del Consejo. Los progresistas ven tan perdida la presidencia de Valencia que no han presentado candidato con posibilidades que tomara el testigo de Boronat.

Los conservadores (nueve de los 20 miembros del pleno) apuestan por Castellano. Para conseguir los 13 votos, necesariamente tiene que ceder el bloque progresista, porque no es suficiente sumar los representantes de CiU i PNV, uno por cada formación.

Según fuentes del sector conservador en el Consejo, se han abierto otras posibilidades de negociación, entre las que en ningún caso computa aceptar al progresista Pérez Navarro como presidente. Madaria pasa por ser tener un perfil muy jurídico, ha sido capaz de sacar adelante la sección de Elche con un éxito reconocido. Pilar de la Oliva, a quien Fernando de Rosa, vicepresidente del CGPJ, niega haber aupado como candidata, desmintiendo lo que otras fuentes judiciales apuntan, es una veterana muy valorada por sus compañeros. Puede recoger los votos de la cuota de género. A Lluch los conservadores no lo ven con recelo. Es moderado y técnico les parece aceptable si no prosperara Castellano.

La convocatoria de septiembre tiene más cromos que cambiar que la anterior porque hay más vacantes. Pero el gran escollo está en Cataluña y en la posición dividida de los progresistas. Cataluña tiene como presidenta a María Eugenia Alegret, conservadora, mujer de consenso, con buenas relaciones con la Generalitat catalana. Su oponente es Miguel Ángel Gimeno, ex portavoz nacional de Jueces por la Democracia, directamente relacionado con Margarita Robles, vocal del consejo y cabeza visible de una de las facciones de los progresistas, la que no acepta ceder Cataluña pero sí la Comunidad Valenciana.

Los conservadores dicen estar convencidos de que Castellano saldrá presidente. Pero por si acaso, se han buscado perfiles menos marcados para cumplir el compromiso de que en la apertura del año judicial en otoño haya nuevo presidente y sea conservador, o casi.