Adán y Eva, versión Costa da Morte
Ni una lata de refresco ensuciando la arena mojada ni un ruido, salvo el parlamento de las gaviotas. Para encontrar esta explanada silenciosa no hay que irse al fin del mundo. La playa nudista de Barrañán se encuentra en Arteixo, a unos 15 kilómetros de A Coruña.
En plena Costa da Morte, donde "no hay ninguna concesión preciosista, todo está diseñado por el trazo insobornable del océano", en palabras del escritor Manuel Rivas. Este kilómetro de suaves dunas está abierto al mar y rodeado de acantilados. Eso sí, solo los madrugadores disfrutan de una estampa como ésta: en verano, sobre todo los domingos, suele llenarse, como cuentan algunos hosteleros de la zona. Estos paseantes a cuerpo gentil le dan la razón a Enrique Jardiel Poncela, que escribió en Máximas mínimas y otros aforismos: "Al amor, al baño y a la tumba se debe ir desnudo".
Con o sin bañador, cuidado con las fuertes resacas y con algunas olas sólo aptas para surfistas. Y que nadie se pierda las vistas del cercano mirador Combouzos.
Fotografía de Xulio Villarino
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