El asesino confeso de una joven le inyectó heroína para robarle el coche
"El asunto está claro. El detenido ha reconocido los hechos", dijo ayer el fiscal Tomeu Barceló tras la declaración del presunto asesino de Ana Niculai, de 25 años. Alejandro de Abarca, de 32, confesó a la juez que la mató inyectándole heroína para robarle su coche. El cuerpo de Niculai fue hallado carbonizado en el maletero el pasado día 19 en S'Albufera de Muro (Mallorca). Abarca, apodado El Enano, estaba en un centro de reinserción tras pasar nueve años en la cárcel por hurtos. Ayer, durante la reconstrucción de los hechos, admitió haber incendiado el vehículo para borrar rastros.
Abarca, que estaba de permiso de fin de semana, secuestró a la joven en un aparcamiento de Palma, la amordazó y acudió en su coche a comprar droga al poblado de Son Banya. Allí, según confesó, la golpeó y la mató, drogado y fuera de sí.
Una semana después fue detenido. Ayer ingresó en prisión incondicional. Le acusan de asesinato, detención ilegal, robo y tráfico de drogas.
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