El AVE en Guipúzcoa tendrá para fin de año 11 de sus 20 tramos en obras
El Gobierno inyecta otros 352 millones al licitar tres nuevos proyectos
Cinco días después del anuncio del Ministerio de Fomento de que los recortes no afectarán al AVE vasco, el Ejecutivo autónomo impulsó ayer tres nuevos tramos del tren de alta velocidad. El Consejo de Gobierno aprobó la licitación por 352,8 millones de obras en el ramal guipuzcoano (el que gestiona directamente, ya que la conexión de Vitoria a Bilbao la acomete la Administración central) y, cuando termine el año, se prevé haber alcanzado una inversión de 761 millones, según afirmó ayer el consejero de Transportes Iñaki Arriola.
Con estos tres tramos (Andoain-Urnieta, Antzuola-Ezkio y Urnieta-Hernani), el tren de alta velocidad en Guipúzcoa tiene en obras seis tramos y adjudicados otros dos. Arriola aseguró que para final de año habrá 11 en construcción y se mostró convencido de que para esas fechas se cumplirá su compromiso de que el 60% del trazado (44 kilómetros del total de 76) esté adjudicado o en obras. Para el próximo año, además de iniciarse las obras en los tramos Bergara-Bergara y Antzuola-Ezkio, se licitarán los de Hernialde-Zizurkil y Zizkurkil-Andoain. Con ellos, sólo restarán tres tramos más, en la zona de Hernani, Astigarraga, Oiartzun e Irún, la estación de Ezkio y los accesos a San Sebastián, en los que se está elaborando el estudio informativo, el trámite previo al proyecto constructivo.
Arriola mantiene su idea de concluir la plataforma de vía para 2016
"Hace un año había un solo tramo en obras, el 4% del ramal guipuzcoano. Y vamos a pasar al 60%", apuntó Arriola para remacar el acelerón que su Departamento ha dado al AVE. El ramal guipuzcoano va bastante más retrasado que el vizcaíno y el alavés, un total de 91 kilómetros que está en obras en más de dos tercios.
Aunque se mostró partidario de planificar esta obra cada año, el consejero mantuvo su opinión, adelantada públicamente en febrero, de que las obras del TAV estén culminadas en 2016. "Espero mantener esa fecha". Arriola se refiere a los trabajos de la plataforma ferroviaria: para la puesta en funcionamiento del tren, hay que colocar la catenaria y realizar las pruebas, lo que se suele prolongarse casi otro año.
Uno de los tres tramos licitado ayer, el de Antzuola-Ezkio, tiene previsto un plazo de obras de cinco años y medio, con lo que se prolongaría hasta el verano de 2016. Pese a tener solo 3,5 kilómetros, la agreste orografía, con fuertes pendientes y valles cerrados, obliga a que casi todo este trazado discurra en un doble túnel, lo que retrasa la ejecución de las obras.
El tren de alta velocidad, con un trazado de cerca de 180 kilómetros (los 90 en Álava y Vitoria, los 76 del ramal guipuzcoano y casi 14 para los accesos a San Sebastián e Irún), será mixto, al transportar tanto viajeros como mercancías. Cuando esté en funcionamiento, el trayecto entre Vitoria y Bilbao solo requerirá 28 minutos; de la capital alavesa a San Sebastián se tardarán 34 y entre ésta y Bilbao el tiempo de viaje será de 38 minutos. La inversión calculada, sin las estaciones, es de 4.178 millones de euros.
65 meses de obra
- De los tres proyectos licitados, que adjudicarán tras el verano para que las obras comiencen el diciembre, el más complejo es el de Antzuola-Ezkio. Hasta ahora es el tramo con plazo de ejecución más largo en el AVE, 65 meses, debido a la abrupta orografía que obliga a hace un túnel bitubo (es decir dos bocas). El coste es de 128,9 millones.
- Los otros son Urnieta-Hernani, el más caro con 144,9 millones (el más largo con 5,2 kilómetros), y Andoain-Urnieta, de 80 millones de presupuesto.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.