Las quejas por no poder estudiar en valenciano llegan al Síndic

La Plataforma en Defensa de l'Ensenyament Públic entregó ayer al Síndic de Greuges, José Cholbi, las primeras quejas de los alumnos que quieren estudiar en valenciano y que no pueden porque la Consejería de Educación no les garantiza su derecho. El portavoz de la plataforma, Ismael Vicedo, acompañado de otros dos miembros del colectivo explicaron ayer que han recopilado 300 firmas de alumnos y padres de los centros educativos de Mutxamel. Un municipio donde el departamento que dirige Alejandro Font de Mora "se ha cargado la única oferta formativa de Bachillerato en valenciano", según Vicedo. La ausencia de oferta de esta línea ha sido efectuada como "parte de las últimas novedades" de Educación para "ampliar la ratio de alumnos" por aula y "reducir el número de profesores", al recortar el número de clases de las tres anteriores -dos en castellano y una en valenciano- a las dos actuales -ambas en castellano-.

El portavoz de la plataforma señaló que esta situación es una muestra de la "política educativa contraria a la defensa de la escuela pública y en valenciano" que lleva a cabo la Consejería de Educación. En la presentación de las quejas, la representante de la plataforma en Mutxamel denunció también la situación del colegio público Manuel Antón, donde se ha creado un nuevo grupo de Infantil en castellano pese a que de las 18 matriculaciones de alumnos que lo compondrán "14 habían pedido estudiar en valenciano".

La plataforma indicó que los cuatro padres que han pedido la escolarización en castellano "tienen derecho, pero no puede ser que ese derecho vulnere el de los otros 14" solicitantes.

Más de 80.000 alumnos carecen de acceso a la educación en valenciano en la enseñanza Secundaria obligatoria.