Nuevas ideas
Políticos del Gobierno y de la oposición se atreven a reconocer que todos vamos a sufrir, por muy impopular que sea semejante vaticinio. Nosotros, ciudadanos, nos quejamos pero hacemos firme propósito de apretarnos el cinturón hasta donde ellos decidan. ¿Va a ser este nuevo consenso entre ciudadanos comprensivos y políticos impopulares la resignada tónica del futuro?
Hay que modificar la identidad del político, su función, sus privilegios, sus carreras, su sentido de la responsabilidad, de la ética y de la vocación perdida. Y todo a favor y en defensa de la democracia, donde el ciudadano cuente de verdad. Pero los políticos no van a cambiar si no cambiamos antes los ciudadanos. Si tenemos nuevas reacciones y hacemos nuevas preguntas, si reclamamos cambios profundos, a lo mejor los políticos tienen nuevas ideas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.