Alquilo mi casa... por necesidad
La crisis aprieta los bolsillos de los propietarios y empuja al alquiler de la primera vivienda para obtener ingresos - En verano es un negocio redondo
Para algunos la primera vivienda es una losa pesada inherente a una hipoteca que hay que pagar todos los meses, para otros un bien inmobiliario que hay que amortizar para cubrir gastos y están los que con ojos oportunistas ven una solución para costearse unas buenas vacaciones. La crisis económica no golpea a todos por igual, pero en momentos de recesión la fórmula del alquiler encaja bien en los bolsillos de todos los propietarios de inmuebles.
Las agencias inmobiliarias e Internet se han convertido en plataformas desde las que captar clientes dispuestos a pagar hasta 2.000 euros por una semana en una vivienda en Hendaya o desde la cual encontrar inquilinos para alquilar la vivienda y así hacer frente a una hipoteca imposible de afrontar. En ambos casos, se trata de primeras viviendas, aunque no todo el mundo está dispuesto a dejar a extraños entrar en sus hogares.
Propietarios vascos alquilan su casa en Hendaya a 2.000 euros la semana
Para muchos, la vivienda es un bien inmobiliario que hay que rentabilizar
En el caso de los alquileres vacacionales, éstas son viviendas donde la casa se mantiene tal y como la tiene el propietario y lo único que se retiran son las fotografías, la comida y la ropa. Cuando la fórmula de alquiler está obligada porque la economía aprieta, la mayoría de los propietarios abandonan la vivienda y regresan a casa de padres o familiares. Como dato, el País Vasco lidera el listado de las comunidades autónomas con el precio medio de la vivienda en alquiler más alto en el mes de enero de 2010, con 11 euros al mes por metro cuadrado.
Las inmobiliarias del País Vasco francés aseguran que la opción del alquiler de la primera vivienda se dispara en épocas de crisis. Sobre todo, cuando los propietarios quieren vender su vivienda y no lo consiguen. Es entonces cuando echan mano de la fórmula de los alquileres para rentabilizar la vivienda.
Morgana, de 38 años y Carlos, de 44, son de Irún pero llevan más de diez años viviendo en Hendaya. Él es comercial y ella está en el paro embarazada de su tercer hijo. Este año han decidido alquilar una o dos semanas su vivienda porque necesitan el dinero. "Tenemos una casa unifamiliar con jardín y lo vemos como un bien inmobliario que hay que rentabilizar", explica Morgana, que durante el tiempo que alquile su casa se irá con con sus hijos al piso de su hermana y su marido se trasladará a casa de su madre. "Si hace falta dormiremos en colchones, pero compensa económicamente el sacrificio". De momento, están pendientes de dos posibles clientes; unos parisinos y unos rusos que pagarían 1.800 euros por cada semana y con los que ha contactado a través de Internet en portales como www.homeaway.es o www.mediavacaciones.com.
María, de 41 años, lo ve como un negocio fácil. Este año es el segundo que alquilan su casa en la playa de Hendaya. En su caso, no lo hacen por necesidad económica sino para financiarse unas buenas vacaciones con sus tres hijos. La mujer es decoradora y su marido consultor de empresas. "Siempre nos vamos dos o tres semanas en agosto y vimos una oportunidad en alquilar la casa que dejábamos vacía", cuenta María, que este año repite con los mismos clientes de Madrid del año anterior. La agencia se encarga de todo; limpieza, contactar con el cliente y tramitar el contrato. "La experiencia es buena, no siento desconfianza porque está la agencia por medio y dejan una fianza muy importante por si hay desperfectos. Además, no siento tanto apego por mis cosas como para que me suponga un problema".
Julia, de 37 años, es de Rentería y vive también en Hendaya por motivos laborales. Trabaja en una panificadora y ha alquilado su casa en tres ocasiones. Al igual que a los demás, les compensa trasladarse a casa de sus padres para conseguir más ingresos en la cuenta corriente. "Este año con la crisis hemos notado mucho más la necesidad de alquilar la casa en verano y así poder sacar unos ingresos para los gastos extra que nos han surgido a lo largo del año", cuenta María madre de dos niños.
El caso de Elena es diferente. Tiene 34 años y se ha visto obligada a alquilar su primera vivienda todo el año porque está en el paro. Hace dos años empezó a no poder pagar la hipoteca cuando el euribor pegó una subida a principios de la crisis y no pudo hacer frente al loft que se compró en el barrio de Igara de San Sebastián. Ahora vive con su madre y paga la hipoteca de 800 euros con los ingresos del alquiler. "Me arriesgué en su día en meterme en un piso de 40 millones de pesetas de entonces yo sola y ahora hay que tirar para adelante. Pero no lo volvería hacer", cuenta Elena, que como solución se plantea vender la mitad de su casa a su hermana mientras encuentra un trabajo que tarda en aparecer.
Más veraneantes que viviendas
Las agencias inmobiliarias están detectando más demanda de viviendas que oferta en localidades turísticas como Zarauz o Bakio, donde los precios de los alquileres se mantienen este año y en algún caso suben por la escasez de inmuebles para alquilar en temporada de vacaciones. "Muchos propietarios que antes alquilaban sólo en verano ahora lo hacen todo el año, bien sea por la crisis o porque prefieren hacerlo así por motivos personales", señalan en la Inmobiliaria Orma de Zarauz.
Las temporadas también empiezan a acortarse. Cada vez es más frecuente que los veraneantes alquilen las viviendas por quincenas en vez de por un mes o incluso la temporada de verano. Los precios este año de una vivienda en primera línea de playa en Zarauz oscilan entre 2.000 y 2.500 euros la quincena, cifras similares a las del año pasado.
En Bakio, este año se sigue alquilando por meses más que por quincenas y los precios también se mantienen en relación a 2009, aunque a última hora se han abaratado los alquileres. En julio ha bajado de 2.000 a 1.800 el alquiler mensual. La novedad este año es que la gente en comparación con otros años ha esperado hasta el final para alquilar las casas. "Si normalmente para Semana Santa ya se ponen en contacto con nosotros este año se ha esperado hasta junio. Supongo que la crisis influye. Aunque nosotros hemos alquilado todo", explica una agente de la Inmobiliaria Zubia de Bakio.
Hay un dato curioso. La llegada de inmigrantes está movilizando la bolsa de alquileres de pisos con precios al alza. Es decir, pisos de cuatro habitaciones con un baño, sin reformas que antes no se podían alquilar por más de 600 euros en Zarauz ahora hay propietarios que los alquilan por 1.200 euros a parejas de inmigrantes que trabajan, muchos con familia. "Esto hace que muchos propietarios tengan el piso alquilado todo el año y sea más difícil encontrar inmuebles libres en verano", señala un agente inmobiliario.
Radiografía
- El alquiler de la primera vivienda se consolida como opción ante la crisis para obtener unos ingresos extra. Otros se ven obligados por no poder pagar las hipotecas.
- En verano el alquiler de casas grandes en el País Vasco francés se paga hasta 2.000 euros la semana. Muchas familias aprovechan las vacaciones para irse fuera y rentabilizar un bien inmobiliario. Otras se trasladan a casas de familiares.
- El País Vasco lidera las comunidades autónomas con el precio medio de la vivienda en alquiler más alto en el mes de enero de 2010, con 11 euros al mes por metro cuadrado.
- Las agencias inmobiliarias apuntan a que este año los precios de los alquileres en zonas turísticas como Zarauz o Fuenterrabia se mantienen e incluso suben porque hay más demanda que oferta de viviendas.
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