Félix Pastor Ridruejo, ex presidente de Alianza Popular
Fue figura clave de la 'derecha civilizada' en la Transición
El Partido Popular despidió ayer discretamente a Félix Pastor Ridruejo, fallecido a los 78 años en Soria. Pastor Ridruejo fue presidente de Alianza Popular -partido del cual derivó el actual PP- en 1978 y una de las figuras clave de lo que algunos expertos, como José Vidal-Beneyto, calificaron como la derecha civilizada que contribuyó al éxito de la Transición. Actualmente era presidente de honor del PP en Soria.
En una escueta nota de prensa, el PP destacó "su esfuerzo y dedicación en la defensa de los valores que inspiran" el partido, al tiempo que manifestaba la solidaridad con la familia del fallecido. "Su figura será siempre reconocida como referente moral e intelectual en la actuación política y social del PP", añadía la nota, que recordaba el papel de Pastor Ridruejo en la Transición por "su talante liberal y profundas convicciones democráticas".
Nació en Zaragoza el 14 de octubre de 1931, y se doctoró en Derecho por la Universidad de la Sorbona, en París. En 1976 fue uno de los promotores del partido político Reforma Democrática, liderado por Manuel Fraga Iribarne con el marchamo de "centro reformista", según publicaba EL PAÍS aquel año.
En enero de 1977, aquel partido se incluyó en Alianza Popular, siempre bajo la batuta de Fraga, y así se presentaron a las primeras elecciones democráticas, el 15 de junio de 1977. La intención democrática estaba muy clara para los políticos de esta nueva derecha. En una conferencia en el Club Siglo XXI, Libre empresa y autogestión, Pastor Ridruejo afirmó: "Alianza Popular solo pactará con quienes hayan dado pruebas manifiestas de defender la democracia y no hará pacto con nadie que ataque la convivencia democrática". Y es que, en aquellos años de recién estrenada libertad, la derecha -y la ultraderecha- que había imperado durante la dictadura franquista quería mantenerse en el poder utilizando los pactos con la nueva derecha civilizada. Entonces primaba la intención del diálogo y no era extraño leer un titular que rezara: "Fraga y Pastor Ridruejo piden respeto para la izquierda". "No seremos nada si no aprendemos a respetar a los hombres de la izquierda y la entrega por sus ideales", afirmaba unas líneas más abajo un Fraga muy conciliador. Sin embargo, Pastor Ridruejo no estaba en todo de acuerdo con el líder. Defendió el acercamiento a UCD, más que Fraga. Y mientras este mantuvo durante un tiempo que la pena de muerte se debía aplicar a los terroristas, Pastor Ridruejo le puntualizó, y subrayó que el líder gallego se refería solo a delitos que afectasen excepcionalmente a la vida social. En cualquier caso, Pastor Ridruejo manifestó entonces su oposición a la pena de muerte.
Manuel Fraga le mantuvo a su lado a pesar de estas discrepancias. Pastor Ridruejo organizó en 1990 el congreso en el que comenzó la era de José María Aznar, pero este no toleró tan bien que se manifestara en 2003 en contra de la guerra de Irak. Como histórico del PP y miembro del comité ejecutivo, había asegurado a El Mundo que "la idea de un PP moderado, humanitario y cristiano" había saltado por los aires con la postura del partido ante la guerra. Calificó entonces a George Bush hijo como "una amistad peligrosa, un personaje lamentable en el mundo moderno": "Mantiene posiciones tan detestables como para alejarnos de él".
Publicista en temas de Derecho Urbanístico, la agencia Efe recuerda su afición a la música. En sus últimos años cultivaba la pintura y era un entusiasta del campo. Deja viuda a María Luisa Alfonso, con quien tenía seis hijos.
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