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El Gobierno entiende el Guggenheim en Urdaibai como asunto "zanjado"

Vizcaya muestra su disgusto por una carta de Urgell y no del 'lehendakari'

La portavoz del Gobierno, Idoia Mendia, reiteró ayer que el proyecto de la Diputación de Vizcaya para un nuevo Guggenheim en Urdaibai es asunto "zanjado", pese a admitir que formalmente la oficialización de ese finiquito se encuentre en lo que llamó "un impasse, un paréntesis". Ahora no hay fecha de cierre, por la negativa de Vizcaya a convocar la reunión del comité ejecutivo que debería dar fe del carpetazo. Esa situación puede prolongarse incluso hasta fin de año, cuando patronato y comité ejecutivo deberán reunirse, según fuentes del Gobierno.

Por más que el diputado general de Vizcaya, José Luis Bilbao insista, o "enrede", o "trate de retrasar lo inevitable", en palabras del portavoz socialista, José Antonio Pastor, la decisión del Gobierno es "firme" y no variará. Pastor tachó de "contumacia enfermiza" la de Bilbao con una cuestión que sabe imposible sin el acuerdo del Gobierno.

López recibiría a Bilbao "encantado", pero no para hablar del proyecto foral
Vizcaya insiste en un pacto que salve el concurso de ideas arquitectónicas

Frente a los llamamientos que la Diputación de Vizcaya sigue realizando para mantener vivo el debate, ahora bajo la forma de llamamiento para "consensuar una estrategia común", según dijo ayer su portavoz, Juan María Aburto, la portavoz afirmó que el lehendakari, o las consejeras de Cultura y de Medio Ambiente, recibirían "encantados" al diputado general de Vizcaya, pero no sería para hablar de su proyecto de nuevo museo, sino para explicarle "con más detalle si cabe" el del Ejecutivo para toda la comarca del Urdaibai.

Aburto, por su parte, confirmó que la Diputación vizcaína recibió una carta de la consejera de Cultura, Blanca Urgell, pidiendo la convocatoria del Comité Ejecutivo del Guggenheim, pero mostró su disgusto por el hecho de que no haya sigo el lehendakari quien haya respondido a la que Bilbao le remitió a López y que no la considera respuesta a ella , ni a los emplazamientos públicos que el diputado general le dirige.

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La Diputación condiciona esa convocatoria a que el Gobierno acepte la realización de un concurso de ideas, al que éste se niega.

Este último tira y afloja se prolonga desde el 23 de junio, cuando el Patronato del museo Guggenheim decidió aplazar la decisión. Al día siguiente Bilbao pidió públicamente, y en carta al lehendakari, una reunión, así como el aplazamiento de la posición última del Ejecutivo a la realización del concurso de ideas arquitectónicas.

Mendia reiteró ayer que el Gobierno no va a financiar ninguna iniciativa museística añadida al actual Guggenheim de Bilbao. Por su parte, Aburto insistió en que quieren un acuerdo sobre el plan estratégico, aunque negó que eso suponga renunciar al proyecto en Urdaibai. Aburto echó mano de nuevo del ya usado "no imponer no impedir". "Si alguien pretende vetar, lo que está haciendo es legitimar el derecho de veto que los demás podrían ejercer", advirtió al Gobierno. La Diputación no contempla adoptar ninguna actitud de "imposición", dijo, sabedora de que ello "podría derivar en el rechazo" del Gobierno "y en una situación de bloqueo", añadió.

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