Pesquisas contra ETA propiciaron el hallazgo de los explosivos para la pesca
La cantidad de Goma 2 localizada en Portonovo es similar a la usada el 11-M
Las investigaciones sobre actividades de ETA pusieron a la Guardia Civil sobre la pista de los casi 121 kilos de Goma 2 incautados en la provincia de Pontevedra, que iban a ser utilizados para la pesca masiva del cerco. Una cantidad de explosivos similar a la que se empleó en los atentados del 11-M. A raíz de las últimas operaciones antiterroristas en Portugal, los servicios de información del instituto armado intensificaron los controles con el país vecino. Una de estas líneas de investigación permitió constatar que parte de la dinamita que se vendía legalmente en España con destino a Portugal estaba entrando de forma ilegal en la provincia de Pontevedra.
Las pesquisas se iniciaron a finales del pasado año, siguiendo el rastro del mercado negro de Goma 2, hasta que saltaron las primeras evidencias sobre el destino que tenían estos explosivos gracias a pinchazos telefónicos que implicaban a armadores y marineros.
Pinchazos telefónicos implicaron en el caso a armadores y marineros
El objetivo de la investigación judicial, dirigida desde Cambados por el magistrado Juan Carlos Carballal, eran las tripulaciones de barcos del cerco con base en puertos del norte y sur de las rías y, la prioridad, encontrar la dinamita. Una operación que estaba planificada para que intervinieran 500 agentes, pero en la que finalmente sólo participó un centenar. La falta de medios obligó al juez y la Guardia Civil a prolongar el operativo durante 10 días, lo cual ha incidido en el efecto sorpresa y en los resultados de la búsqueda de más explosivos.
Los indicios apuntaban a que había una partida importante de explosivos que podía estar almacenada en distintos lugares, aunque, en realidad, la cantidad de Goma 2 incautada hasta el momento es mucho mayor de lo que se esperaba, según las fuentes consultadas.
La declaración de algunos de los 13 detenidos ha sido crucial para hilar la madeja y localizar un auténtico arsenal en una finca de Portonovo, en el municipio de Sanxenxo. Ocultos bajo tierra y en garrafas, la Guardia Civil localizó un zulo con más de 100 kilos de Goma 2, una cantidad que hubiera hecho saltar por los aires a medio pueblo, el centro turístico de las Rias Baixas. Los análisis con "marcadores" de los Tedax confirman que más del 90% de la dinamita incautada en el puerto de Vigo y en Portonovo tiene la misma composición y ha sido fabricada por la multinacional española Maxam.
El juez tiene previsto levantar el secreto de las actuaciones la próxima semana. Aunque la investigación alcanza a otros puertos gallegos, no está en los planes de los investigadores ampliar las detenciones, al menos de forma inminente. Sin embargo nadie descarta que aflorar más dinamita, incluso bajo el agua.
Una de las hipótesis que barajan los investigadores es que los explosivos que puedan tener algunos marineros estarán bien escondidos y están convencidos de que no será utilizada, al menos por una buena temporada. Ahora se ha sabido que los propios marineros manipulaban los cartuchos para administrar las dosis empleadas en la captura de la sardina. Así, por ejemplo, alguno de los detenidos reconoció que llegaban a dividirlos en tres partes.
El magistrado, de acuerdo con el fiscal, también prevé poner en libertad a tres de los imputados que están detenidos, con una fianza de 90.000 euros, la misma que se fijó para el armador, Juan José Deza, propietario de los 120 kilos de explosivos intervenidos en Portonovo. El fiscal ha tenido en cuenta sus declaraciones inculpatorias y la colaboración que han prestado. Está previsto que se cite a declarar a un armador de Vigo,, porque en el último registro efectuado en el puerto uno de los perros olfateó restos de explosivos que lo relacionan con el caso. A otro armador de Ribeira se le llamará como testigo.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.