La búsqueda de la desaparecida en Roquetas se reanuda

Un centenar de efectivos de la Guardia Civil de Almería se desplazó ayer a la zona conocida como Mohuyo, en el término municipal de Roquetas de Mar, para continuar con la búsqueda de Lourdes García, una joven de 34 años que está desaparecida desde octubre. Los trabajos se iniciaron a las 7.30, pero los agentes se vieron obligados a detener la búsqueda debido a las altas temperaturas. Según lo previsto, las labores continuarán hoy.

Se trata de la segunda ocasión en la que se busca en esta zona, cercana al domicilio de la desaparecida. En la primera, además de efectivos de la Benemérita, participaron amigos y familiares de Lourdes García. El segundo rastreo no se debe al hallazgo de nuevas pesquisas, según aseguró el portavoz de la familia, Pedro Pérez. "No pensamos que haya hechos novedosos. Al contrario, se trata de la conclusión de nueve meses de investigación, donde se relacionan lugares que tengan que ver con los círculos en los que se movía Lourdes", valoró.

La zona en la que se centra la búsqueda es una rambla con terraplenes en la que se puede encontrar algunos invernaderos y cortijos. Al norte se encuentra una zona residencial y varios centros educativos privados. La familia espera noticias tras esta nueva intervención policial, según el portavoz y cuñado de la desaparecida. "Está resignada desde hace mucho tiempo a lo que sea, lo que el destino quiera", añadió. Desde la búsqueda efectuada en las Salinas de Roquetas de Mar, al inicio de las batidas, no se había registrado tanta expectación mediática como laque se vivió ayer.

Nadie ha vuelto a ver a Lourdes García desde el 4 de octubre, una vez que finalizó su jornada laboral en una estación de servicio de Roquetas de Mar. Una de las cámaras de seguridad de su empresa registró su marcha pasadas las 15.00 hasta que se introdujo en su coche, un turismo marca Peugeot, modelo 206 de color gris metalizado.

En ese momento vestía una camisa rosa con el logotipo de Cepsa y un pantalón gris con una raya roja en el lateral. Su operador de teléfono móvil no registró en los días posteriores la salida de mensajes de texto y llamadas mientras que tampoco se detectaron movimientos en sus cuentas bancarias.

La Guardia Civil halló 48 horas después de la desaparición su vehículo en las inmediaciones de la Plaza de Toros de Roquetas de Mar, con sus pertenencias personales en el interior, las llaves puestas en el contacto y los seguros de las puertas alzados.