La mesa musical Reactable se produce industrialmente un 60% más barata

Lo han logrado. El Grupo de Tecnología Musical de la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona, capitaneado por Sergi Jordà, ha conseguido lo que de entrada parecía una utopía: desarrollar y producir su mesa musical interactiva Reactable.

Reactable saltó a los honores de las crónicas en 2007, gracias a la cantante islandesa Björk que, tras verlo en YouTube, decidió adquirirlo para la gira de Volta.

Entonces fueron muchas las empresas, que quisieron comprarlo para encajarlo en sus proyectos de mesas interactivas enfocadas al entretenimiento doméstico. "Hubiera sido la elección más fácil, pero habríamos perdido el control del proyecto y la evolución se habría parado, porque su desarrollo habría estado supeditado a la lógica del comercio a gran escala", afirma Jordà.

"Instrumento sin comparación"

El y sus compañeros se lanzaron en la aventura de la producción en serie. Tras dos años, Reactable Live es real. "Sólo rediseñando conjuntamente el software y el hardware hemos podido crear un instrumento que no tiene comparación en el mercado", asegura Pep Viladomat, que se ha sumado al grupo para este proyecto.

Reactable tiene todos los números para convertirse en precursora de una nueva generación de instrumentos musicales digitales que permiten tocar y visualizar la música intuitivamente mientras se actúa.

La nueva versión no sólo es más resistente y plegable, sino que pasa de 60 a 20 quilogramos de peso, gracias al armazón de aluminio y la pantalla acrílica. No necesita transporte especial, porque se reduce a un bulto que se factura en el avión y a un maletín con los elementos más delicados, que se lleva en la mochila. Antes, para montarla se tardaba más de dos horas y era necesaria la presencia de un técnico del grupo; ahora lo puede hacer cualquiera en 15 minutos.

El precio ha caído de 30.000 a 9.700 euros. "Quizás se habría podido bajar aún más si lo hubiéramos fabricado en China, pero preferimos hacerlo en pequeñas empresas catalanas, que garantizan poder seguir el proceso y verificar cada detalle", indica Viladomat.

El nuevo software, preparado para futuras ampliaciones, mantiene el carácter instintivo y el sistema original, basado en la manipulaciones de objetos físicos reales, que ofrecen posibilidades infinitas para la expresión musical electrónica. Sin embargo, ha sido enteramente reescrito con muchas más prestaciones, un sistema de menús que se despliegan en la propia mesa y diferentes capas de sonidos.

"Reactable se inspira en los sintetizadores modulares analógicos, desarrollados por Bob Moog a principio de la década de 1960, enriquecido con conceptos nuevos como el sampling, los efectos de procesado digital o la tecnología de multitouch", añade Jordá.

La primera serie limitada de 20 ejemplares, firmados y numerados como una obra artística, está vendida y se empezará a entregar a final de mes, con lo cual se verá y escuchará la mesa sonora en muchos conciertos del verano.

Reactable que vio la luz como resultado de muchos años de investigación en el campo de la música computacional y la interacción persona-ordenador, ha recibido numerosos premios nacionales e internacionales, como el de Ars Electronica.