CajaGranada opta por buscar alianzas fuera de Andalucía

El Consejo de Administración de CajaGranada aprobará hoy un preacuerdo nupcial con otras tres entidades de ahorros de fuera de la comunidad (Caja Murcia, la balear Sa Nostra y Caixa Penedés) para formalizar en un futuro una fusión fría (SIP, Sistema Integrado de Protección), según confirmaron ayer media docena de fuentes. La entidad que preside el socialista Antonio Jara no ha prestado oídos a las peticiones que, a última hora, le ha hecho llegar el Gobierno de José Antonio Griñán y el PSOE de Andalucía para que "mire al sur" y busque alianzas con las otras dos cajas de la comunidad que quedan vivas: Unicaja y Cajasol. La tercera en liza, Cajasur, está intervenida y se venderá al mejor postor. El acuerdo que se firmará hoy es un protocolo de intenciones y no es irreversible, insistieron ayer algunos medios, dejando abierta la puerta una fusión en clave andaluza.

Jara convocó ayer un consejo de administración extraordinario -que se celebrará al mismo tiempo que el de las otras entidades afectadas- con dos puntos en el orden del día: análisis, estudio y toma de decisión, en su caso, sobre una eventual alianza estratégica mediante SIP por parte de CajaGranada. En el segundo figura el solicitar las correspondientes ayudas del FROB..

¿Han llegado a un principio de acuerdo?, se le preguntó al ex alcalde socialista. "Así debe ser porque mañana [por hoy] se va a pronunciar el consejo de administración sobre ese extremo". La decisión de la caja granadina cuenta con el respaldo de todos los actores políticos locales implicados. El PSOE y el PP de Granada respaldan ese acuerdo que para todas las fuerzas políticas de la provincia "refuerza" la posición de la entidad granadina. En un consejo de administración celebrado hace dos semanas en Jaén la opinión unánime de los consejeros fue seguir esa vía.

Desde que se hizo cargo de la caja, el también ex alcalde de Granada siempre apuntó fuera de Andalucía para llevar a cabo una alianza estratégica y también los sindicatos y empresarios le han brindado su apoyo en la provincia. Jara marcó sus "límites infranqueables": la identidad corporativa, el no coste laboral y la lealtad territorial.

El paso que va a dar hoy la entidad granadina era conocido desde hace tiempo por el Gobierno andaluz, al que el plantón de Cajasur a Unicaja y la posterior intervención por parte del Banco de España de la caja cordobesa le ha dejado traspuesto. De ahí, las recomendaciones de última hora del consejero de Economía, Antonio Ávila, a Jara para que "mirara al sur" y también las declaraciones públicas del número dos del PSOE, Rafael Velasco, sobre que la fusión fría de CajaGranada "no fortalece el sistema financiero andaluz". Ávila dijo ayer que considera "correcta" la decisión de la granadina de un SIP con cajas de fuera "como cualquier otra" y evitó polemizar con el vicesecretario general de su partido asegurando que "respeta profundamente" su postura.

La consejera de la Presidencia y portavoz del Gobierno, Mar Moreno, consideró ayer que los planes de la entidad con sede en Granada "no es perjudicial" para el sistema financiero andaluz, lo que chirría con la opinión de Velasco. ¿Cuál es la posición del Gobierno andaluz? ¿Qué estrategia tiene diseñada ante el movidón de concentraciones? ¿Mantiene o no mantiene el proyecto de gran caja que los socialistas defienden en su programa electoral y que han promovido en los últimos 10 años? Todas estas preguntas no tienen, hoy por hoy, respuesta porque la danza financiera ha desbordado a todo el mundo.

En este sentido, dos fuentes conocedoras de la reunión del presidente de CajaGranada con Ávila aseguran que Jara preguntó cuál era la hora de ruta del Gobierno andaluz y que la pregunta quedó sin responder. Esta indefinición del Gobierno andaluz es lo que empiezan a echar en falta en algunos sectores del PSOE. "No hay diseño ni una estrategia propia desde Andalucía", se quejaba un dirigente. "Imagino que debe haber una hoja de ruta, pero no sabemos cuál es", apostilla otro. Desde la dirección del PSOE andaluz se desmiente de manera categórica que no haya planes de futuro.

El Ejecutivo andaluz insistió ayer en que no hay ninguna urgencia para que Unicaja y Cajasol participen en la carrera de fusiones actual, como subrayó ayer la consejera de la Presidencia, Mar Moreno. Esta recordó que la "batuta" la lleva el Banco de España y que las cajas andaluzas "no tienen ningún tipo de problemas" para acogerse al FROB, por lo que se darán "los pasos oportunos en los momentos oportunos". Respecto a qué pasará con el Banco Europeo de Finanzas (BEF), una especie de SIP en el que están todas las cajas andaluzas, aseguró: "Algunos planteamientos del pasado no tienen hoy la vigencia que tenían".