La banca se pone a la cabeza del rebote

La Bolsa se dio ayer una alegría. Casi se puede decir que era de rigor. Tras cuatro días a la baja, en el parqué empezaban a aparecer gangas que hacían presagiar la subida. Así, si el castigo en los días precedentes se había centrado sobre la banca, ayer fue este sector el que recogió los beneficios. Ni las dificultades que tuvo el Tesoro para colocar la deuda enfriaron los ánimos compradores.

La subida de valores como Santander (6,13%) y BBVA (4,71%) tiraron del Ibex 35 hasta llevarlo a ganar un 3,68% y cerrar en 9.627,6 puntos. Desde la jornada de euforia del lunes de la semana anterior hasta ayer, cuando el Ibex ganó más de un 14% en un día, ambas entidades acumulaban caídas del 13,24% y del 12%, respectivamente. Se crearon así los mimbres para una subida que acabó siendo la segunda mayor del año, a la que también contribuyó el otro gran valor de la renta variable española, Telefónica, que ganó un 3,54%.

Las ganancias fueron generalizadas. Entre los que ponderan en el índice selectivo, sólo uno cerró la sesión en rojo, Telecinco, que perdió un 0,27%.

También los demás índices españoles recogieron beneficios. El Ibex Medium, en el que ponderan las firmas cotizadas de tamaño medio, y el Small Caps, donde lo hacen las más pequeñas, también se anotaron ganancias.

La corriente optimista mantuvo un alto volumen de negociación. En total se movieron en todo el mercado 4.960 millones. Una cantidad importante, que sin embargo, es menor que la negociada en las dos jornadas precedentes.

Los números verdes también dominaron los paneles del resto de mercados europeos, aunque con menos fuerza que en España. El paneuropeo Euro Stoxx 50 subió un 2,39%. Tras él, el parisino CAC 40, que ganó un 2,08%.

La corriente optimista en Europa no fue suficiente para mantener la cotización del euro. Las dudas sobre la deuda soberana de los países que integran el euro castiga a la moneda única, que no levanta cabeza en los mercados de divisas y día a día sigue perdiendo posiciones frente al billete verde. Ayer de nuevo volvió a caer y ahondó en el mínimo en cuatro años que ya había marcado el día anterior. Un euro se llegó a pagar a 1,216 dólares.