El PSPV reclama que la poda de organismos no sea "una broma"

Los socialistas valencianos tienen en el Programa para el saneamiento y la reforma de la economía valenciana, que presentó su secretario general, Jorge Alarte, la semana pasada, un manual perfecto para defender recortes en el sector público autonómico, en sintonía con el plan de ajuste propuesto por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. La responsable de Economía del PSPV-PSOE y diputada, Cristina Moreno, reiteró ayer que su grupo es partidario de la reducción de sueldos de los consejeros de la Generalitat, de los altos cargos y de los diputados autonómicos, así como de un drástico recorte de organismos públicos, de la reducción a la mitad de los cargos de designación directa y de un ajuste presupuestario del 15%. Moreno arremetió, por ello, contra el anuncio de recortes del consejero de Economía, Gerardo Camps, que calificó de "broma de mal gusto".

Los socialistas son partidarios de rebajar los sueldos de los diputados

Según la diputada, el anuncio de eliminar ocho empresas y 10 fundaciones de la Generalitat con el resultado de un ahorro de 115 millones de euros en tres años "solo es una manera de salvar la cara" por parte de un Consell que "no está dispuesto a apretarse el cinturón". Moreno explicó que existen 129 entidades, sociedades y fundaciones públicas de la Generalitat. En los presupuestos de 2010, las entidades públicas (sin contar las fundaciones) alcanzan los 3.500 millones de euros, de los que 500 millones son para gastos de personal. La falta de información sobre una gran parte de ellas las convierte, dijo, en auténticos "chiringuitos".

Tras analizar los organismos que pretende eliminar el Gobierno de Francisco Camps, Cristina Moreno explicó que la Fundación Cavanilles de Altos Estudios Turísticos "había desaparecido de los presupuestos hace mucho tiempo". De Gestión y Eficiencia Empresarial se sabe poco más que en ella trabajan dos personas: el carácter "fantasma" de ese organismo es similar al de otros cuya disolución se anuncia, como la Fundación de Medio Ambiente o las tres empresas Sol y Viviendas Valencianas, Viviendas del Mediterráneo y Nuevas Viviendas Valencianas que creó Rafael Blasco cuando era consejero de Territorio y Vivienda para proyectos urbanísticos y que "no han urbanizado nada". En otros casos, Moreno dudó del ahorro que pueda significar unir fundaciones como las de las Artes Escénicas y las Artes Contemporáneas, "que acumulan deudas". La diputada sí que dio la bienvenida a la fusión del Ivex y la sociedad Valencia Community Investments, "creada para premiar a un desafecto de Zaplana", o a la de la Sociedad Proyectos Temáticos con la Sociedad Gestora para la Imagen Estratégica y Promocional, que creó Esteban González Pons "porque la primera olía a Zaplana y terminó oliendo al Bigotes".

En la misma línea, la portavoz socialista en el Ayuntamiento de Valencia, Carmen Alborch, reclamó ayer a la alcaldesa Rita Barberá un nuevo y auténtico plan de austeridad, que tenga en cuenta las directrices del Gobierno y de la Federación Española de Municipios y Provincias. "Es el momento de ver todas las fundaciones que existen, si están cumpliendo los objetivos, si se pueden rebajar o no los fondos, si son adecuadas o no", apostilló Alborch.