El ex alcalde de Castellón es el alto cargo más rico de la Generalitat

José Luis Gimeno, que fuera alcalde de Castellón entre 1991 y 2005, resulta ser el alto cargo de la Generalitat más rico, según se desprende de la declaración de bienes, derechos y obligaciones patrimoniales de los 186 máximos responsables de la Administración autonómica que ayer difundió el DOCV.

Gimeno asegura poseer bienes por un valor total de 3,7 millones de euros. 2,9 millones de euros serían resultado de la suma de los valores catastrales de sus propiedades. El ahora consejero delegado de la empresa pública Proyecto Cultural de Castellón asegura poseer 869.938 euros en concepto de "otros bienes".

Gimeno dejó la alcaldía de Castellón mediada la pasada legislatura como resultado de su abierto enfrentamiento con Carlos Fabra, el todopoderoso presidente de la Diputación y del PP de Castellón. Pero a cambio de asumir el control del proyecto de la denominada Ciudad de las Lenguas, una iniciativa que lleva cinco años plasmada únicamente sobre el papel. Gimeno cobra 6.000 euros al mes desde hace cinco años como consejero de la sociedad pública.

El director general de Inmigración declara 12.000 euros de patrimonio

La declaración patrimonial que publica el DOCV solo comprende la situación patrimonial de los altos cargos en números brutos y omite cualquier dato relativo a la localización de los bienes inmuebles para "salvaguardar la privacidad y seguridad de sus titulares". Tampoco aporta ningún detalle sobre el contenido de "otros bienes". No indica si las cantidades consignadas refieren a cuentas bancarias, fondos de pensiones o participaciones en sociedades, por ejemplo.

Es el caso de Juan Cotino, por ejemplo, el consejero más rico del Gobierno autonómico. Cotino posee bienes inmuebles cuyos valores catastrales suman menos de 8.000 euros. Pero en el capítulo de "otros bienes", Cotino declara poseer un total de 1,9 millones de euros.

Consuelo Ciscar, directora del IVAM, ocupa el segundo lugar por valor de sus bienes patrimoniales en términos absolutos (ver cuadro).

Los datos difundidos por el DOCV revelan que José Eduardo Clérigues, director general de Farmacia, resulta ser uno de los altos cargos más ricos con un patrimonio total de 1,1 millones de euros y una hipoteca de 66.865 euros.

También declara un valioso patrimonio Miguel Ángel Tarín, director del Instituto Valenciano de Seguridad y Salud en el Trabajo, quien posee 1,3 millones de euros y arrastra un pasivo de 224.000 euros.

Llama la atención que Josep Maria Felip, director general de Inmigración y uno de los funcionarios con más antigüedad en la Generalitat, resulte ser el más pobre. No tiene ningún bien inmueble y declara apenas 12.000 euros en el concepto de otros bienes.

También es llamativo el elevado pasivo de 636.599 euros que arrastra el director general del Instituto Valenciano de Finanzas, Jorge Vela, el máximo responsable de la gestión de la abultada deuda pública que arrastra la Generalitat.

Francisco Camps, el presidente de la Generalitat, resulta ser el más pobre de entre todos los miembros del Consell. Camps declara la titularidad de bienes inmuebles cuyo valor catastral suma 55.169 euros y otros 12.105 euros bajo el concepto de otros bienes. No arrastra ninguna hipoteca.