Grace Kelly, un icono de la moda 30 años después
El Victoria & Albert muestra su estilo como princesa y actriz
Actriz vocacional que dio sus primeros pasos como modelo publicitaria, diosa de Hollywood por obra de Alfred Hitchcock y finalmente princesa de Mónaco. Las múltiples facetas de Grace Kelly confluyeron en un estilo único, exquisito y clásico a la vez que práctico, al que rinde homenaje el museo londinense Victoria & Albert. La exposición, que se inaugurará el próximo sábado, disecciona la figura de la hermosa y elegante Grace como icono perdurable de la moda, a través de un recorrido por los trajes, joyas y complementos que contribuyeron a labrar su imagen glamourosa dentro y fuera de la gran pantalla.
Desde el sugerente vestido verde perlado con el que recogió el Oscar en 1955 por su papel en La angustia de vivir, o tres de los impecables modelos que un año después lucía su afilada figura en Alta sociedad, antes de embarcarse con rumbo al pequeño principado a orillas del Mediterráneo, hasta la adaptación de su estilo al papel de primera dama de Mónaco. Las películas que complementan la muestra exhiben las imágenes de Kelly, ataviada con un dos piezas de color crema, en la rueda de prensa donde confirmaba su compromiso con Rainiero y un cambio radical de vida.
Edith Heath, la legendaria diseñadora de vestuario que logró el Oscar en ocho ocasiones, se tomó muy mal que Grace Kelly no le encargara su vestido de novia, y tenía su punto de razón: la actriz nunca apareció más esplendorosa que en La ventana indiscreta y Atrapa a un ladrón (ambas dirigidas por Hitchcock) con el espectacular vestuario elaborado en el taller de Heath en la Paramount.
El ingreso de Kelly en el mundo de la realeza transmutó aquel estilo clásico de los cincuenta en un gusto por la alta costura que tuvo en Dior, Balenciaga, Givenchy y Saint Laurent sus grandes favoritos. Fue un vestido de gasa azul firmado por Christian Dior el que permitió a la princesa proclamar desde la portada de Paris Match (1956) que las mujeres embarazadas podían seguir transmitiendo un chic innato. Al fin y al cabo se trataba del mismo personaje que convirtió en pieza perenne de la moda un bolso de Hermès, el Kelly bag, bautizado en honor de su famosa usuaria y una de las estrellas de la exposición en el V&A. Casi 30 años después de su muerte prematura, el museo de Londres nos confirma que Grace Kelly fue un icono del estilo singular y único.
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