"Valentino sabe vender muy bien su historia"
"Comer es un placer, sí, sí". Es lo que masculla Jorge Lorenzo (Palma de Mallorca, 22 años) mientras hinca el tenedor sobre una pieza de pollo acompañada por un buen puñado de verduras apenas cocinadas y una cucharada de arroz blanco que ni siquiera se atreve a mirar. Su brazo derecho, arremangado, muestra sus heridas de guerra: los dedos magullados, un par de cicatrices más en el antebrazo y otra, en forma de T, en el primer metacarpiano. Es la que le recuerda que llega con apuros al primer Gran Premio de MotoGP, esta noche (22.00, TVE-1) en Qatar. Aún así, saldrá tercero. Stoner, otra vez, logró la pole. Rossi, será segundo.
Pregunta. ¿Cómo se encuentra físicamente?
Respuesta. Cuando cojo un vaso o una botella y veo que no puedo apretar mucho me siento impotente, pero estoy bastante mejor que hace una semana, mucho mejor que hace dos y muchísimo mejor que hace tres. Voy a llegar muy justo, al 90%.
"Quiero tener más poder sobre mi moto; por si algún día soy el líder de la marca"
"Cada año siento menos presión y confío más en mi forma de pilotar"
P. ¿Cómo ha mejorado la M1?
R. El chasis es un poco mejor, nos da más agarre en medio de la curva. La Yamaha funciona muy bien, es una moto muy fácil de llevar, muy dócil. Sigue siendo una moto ganadora, el problema es que la Ducati se ha acercado un pelín más este año y la Honda parece que también.
P. Y Stoner está en forma.
R. Stoner está fuerte y tiene un año más de experiencia. Será muy complicado ganarle, más si la moto va mejor. También Valentino está en su mejor momento, con 31 años. A pesar de que cada año el nivel es más alto, él se supera a sí mismo. Rossi es más peligroso que nunca.
P. ¿Tiene más presión Rossi con Lorenzo en su mismo taller, o al revés?
R. Yo cada año tengo menos presión. Llámalo experiencia o que he trabajado más la relajación, pero cada vez confío más en mi pilotaje. Si estoy preparado y mi pilotaje es bueno, lo haré bien; si no, tendré que ver qué ha ido mal y trabajar más.
P. El taller seguirá este año separado por un muro...
R. Yo no lo he creado. A mí me da igual que mi compañero de equipo pueda ver mis datos de telemetría. Para mí esto es una completa tontería, no afecta ni a mis resultados ni a los de Rossi; por eso yo nunca lo haría.
P. Rossi dice que usted se basta para desarrollar su propia moto.
R. Yo quiero tener más poder sobre mi moto. Más que nada por si algún día soy el líder del proyecto de la marca; le interesa a Yamaha y me interesa a mí. Pero, Valentino vende muy bien su historia y con la prensa es muy bueno, tanto como desarrollando la moto. Y a mí me va muy bien que sea él el que desarrolle la moto.
P. El año pasado se fue al suelo en Donington Park, en Brno, en Phillip Island... ¿Ha aprendido a ser segundo o tercero?
R. Yo nunca he sido conformista. Pero para ganar el campeonato tengo que aprender a serlo. El año pasado me caí unas cuantas veces, pero el anterior me caí unas cuantas veces más.
P. ¿Su madurez influye en su manera de llevar la moto?
R. Sobre todo en la paciencia. En la seguridad, en no tener nervios antes de una carrera. Siempre que salía a pista antes quería ser el más rápido, daba igual si era pretemporada o un entrenamiento. El primer año decía: "más gas". Y al suelo: lesión de tobillos, injerto de dedos, conmoción cerebral... He ido aprendiendo a base de palos.
P. ¿En qué ha mejorado?
R. Estoy trabajando mucho las salidas, que es uno de mis defectos técnicos: no acabo de cogerle el punto al embrague. También he estado trabajando en la lluvia; no me siento seguro porque siempre que quise ir rápido en lluvia me caí.
P. ¿Qué papel ha jugado su padre en este último año?
R. Rompí con mi padre y me decanté por mi ex mánager, Dani Amatriain; pero con el paso de los años, me di cuenta de que mi padre tenía razón. Ahora nos hemos vuelto a reconciliar. El año pasado me entrené con él otra vez en Mallorca, volví a los inicios, a la base técnica, y fue muy divertido. Aprendí mucho. Estamos recuperando el contacto. Madre y padre sólo hay uno.
P. Su chulería le hizo despertar antipatías en sus inicios. ¿Es ahora menos irreverente o ha aprendido a tratar a los medios?
R. Un poco de todo. Cuando uno empieza a triunfar la gente se resiste a aceptarlo. Yo soy de carácter fuerte. Y cuando estoy concentrado en el trabajo, estoy serio. Pero los hay que confunden seriedad con chulería o arrogancia y es al contrario. A veces me muestro serio por timidez.
P. ¿Cuál es su meta este año?
R. Me lo preguntan en cada entrevista... No me marco un objetivo resultadista. No me digo que este año tengo que ser campeón del mundo. El ser campeón depende de muchos factores.MUNDIAL DE MOTOCICLISMO Gran Premio de Qatar
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