Manassero, el niño récord que admira a Seve

El saque de honor lo comparten hoy dos viejas glorias, Arnold Palmer y Jack Nicklaus, pero el récord es para Matteo Manassero, el niño italiano que con 16 años bate la marca de precocidad del Masters que desde 1952 lucía Tommy Jacobs. Manassero, también el ganador más joven del Open Británico amateur, es un niño que ama a los clásicos. Su referente no es el musculoso Tiger, ni el talentoso McIlroy, sino el genial Seve Ballesteros. También habla emocionado de Nick Faldo y Greg Norman, con los que creció viendo el Masters, y en Augusta ha escuchado los consejos de Tom Watson, que casi podría ser su abuelo. Mientras muchos jovencitos del circuito van por libre, preocupados del músculo y la moda, Manassero recuerda las jerarquías, seguirá estudiando hasta los 19 y apenas sale de noche. "No soy el típico chaval de 16 años", admite.

"Con Seve he jugado. Fue en un torneo en Italia, yo tenía cuatro años, y se acercó a jugar conmigo. Y he visto muchas cintas sobre él", explica. Los palos los cogió a los tres años gracias a su padre, trabajador en una empresa de material quirúrgico. Como Romeo y Julieta, Manassero es de Verona, pero, futbolísticamente, el chico no es del Chievo, sino que tifa por Milan y Barça. El martes vio el partido contra el Arsenal junto al británico Lee Westwood: "Cuatro de Messi, increíble".

En Augusta ha compartido habitación, las literas del nido del águila, en la azotea de la casa club, con el resto de amateurs, viendo el baloncesto universitario por la tele y soñando con un futuro profesional. Con los hermanos Molinari, es la gran esperanza italiana. El presidente de su federación lo resume así: "Manassero es para el golf como Pato para el Milan".