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Reportaje:

Luna de hiel entre Armstrong y el Giro

Ni el RadioShack del tejano ni el equipo de Riccò estarán en la carrera rosa

Carlos Arribas

No se puede tener todo en la vida ni siendo Lance Armstrong. El amor que en su segunda vida deportiva está conquistando el ciclista tejano entre sus colegas del pelotón, los jóvenes que crecieron viéndole ganar Tour tras Tour, no es un amor regalado; tiene un precio o varios. Uno es el desamor de algunos organizadores, como el del Giro, que no hace ni un año bailaba a su lado y las últimas semanas encadena actos de agresión hacia Armstrong.

La luna de miel entre Angelo Zomegnan y Armstrong concluyó abruptamente durante la etapa caótica y urbana de Milán de la pasada edición, cuando el estadounidense lideró un plante de corredores y Zomegnan afirmó que a algunos ciclistas, cuando se hacen viejos, se les acortan las piernas y se les alarga la lengua. Armstrong no volvió a abrir el pico y el matrimonio inició una particular versión de La guerra de los Rose. La batalla culminó ayer, cuando el Giro anunció que entre los 22 equipos invitados para la próxima edición, desde el 8 de mayo, no está el RadioShack, el del tejano, una aclaración gratuita, pues ya el 23 de enero Johan Bruyneel, el director del conjunto, comunicó por carta al organizador que renunciaban a participar este año por coincidencia de fechas con la Vuelta a California, que, con patrocinador norteamericano, les interesa más.

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"Creo que no le sentó bien aquella carta", dice Bruyneel, "porque poco después nos anunciaron que no nos invitaban a la Tirreno-Adriático". Y justamente tras la Tirreno y en vísperas de la Milán-San Remo, otra joya de Zomegnan, Bruyneel dijo que Armstrong no correría la classicissima por gastroenteritis.

Entre los 22 equipos del Giro, dos españoles, el Caisse d'Épargne y el Footon. Y entre los corredores más importantes -Sastre, Wiggins, Pellizotti, Basso, Evans-, una ausencia señalada, Riccardo Riccò, el gran rival de Contador en 2008. El cuento de hadas que debía ser su regreso tras 20 meses de sanción por dopaje se echó a perder cuando su novia, ciclista, dio también positivo por Cera. Riccò la dejó y se fue a Sicilia. Hoy vuelve a competir en la Semana Coppi-Bartali.

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Sobre la firma

Carlos Arribas
Periodista de EL PAÍS desde 1990. Cubre regularmente los Juegos Olímpicos, las principales competiciones de ciclismo y atletismo y las noticias de dopaje.

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