El 60% de centros de formación de adultos no ofrece título de graduado

Los centros de formación de adultos nacieron en 1985. Pero la ley que reguló su funcionamiento no se aprobó hasta 1995, bajo gobierno socialista. 15 años después del reconocimiento institucional de la formación de adultos que potencia la Unión Europa, su desarrollo en la Comunidad Valenciana no cumple las "expectativas" ni los "objetivos" de alcanzar la financiación del 1% del PIB, que los gobiernos europeos pactaron en la Cumbre de Lisboa de 2000. El 60% de centros de formación de adultos en la Comunidad Valenciana no ofrece aún el título básico de Graduado de Enseñanza Secundaria, que exige Europa para trabajar, según un informe comparativo de la evolución y desarrollo de la ley valenciana de la Mesa d'Agents Socials per a la Formació Permanent d'Adultos.

Muchas cabeceras de comarca han pedido, sin éxito, dar el título de ESO

De los 242 centros EPA, dos tercios ya dependen de los Ayuntamientos

"Me indigna políticamente que el gobierno de la Generalitat -con una crisis tan profunda como ésta y con todas las personas procedentes de la construcción sin ninguna educación que se han quedado desempleadas- no priorice la formación de adultos", denuncia Dolors Monferrer, profesora de un centro EPA en Paterna-La Coma y miembro de la Mesa d'Agents, que recuerda que 576.000 valencianos en edad de trabajar están desempleados. Es decir, un 22,65% de la población.

"Este tramo de formación básica en todo el Estado, como es el Graduado Escolar de ESO, no se está cubriendo en todos los centros de la red pública de la Generalitat, porque el gobierno valenciano no lo considera una prioridad", advierte Monferrer.

No tienen esta oferta, pese a solicitarla, centros como los de la Malva-rosa o Natzaret (que son barrios de Valencia muy necesitados de formación), ni muchas cabeceras de comarcas de interior como Enguera, Rincón de Ademuz, Ayora, Morella, etcétera.

La Generalitat valenciana, gobernada por el PP desde 1995, es la única con competencias plenas en la formación de adultos y casi todas en el resto de formación permanente a lo largo de la vida, subraya Monferrer. "Las actividades que se hacen a nivel municipal o de diputaciones deberían de ser subsidiarias", precisa.

Pero, su recorrido ha ido en sentido contrario. "Sólo en 1995, siendo Joan Romero consejero de Educación se alcanzó el techo financiero prefijado en la Ley de Formación de Personas Adultas (con 500 millones de pesetas de entonces), siguiendo el modelo alemán", puntualiza un histórico miembro de la Mesa d'Agents Socials, que insiste en que "el equilibrio inicial consistía en que la Generalitat financiaba el 78% de gastos y los ayuntamientos el 32%".

"Con el actual sistema de financiación al 50%, se puede decir que lo que reciben los ayuntamientos de la Generalitat es la mitad de lo que gastan". De los 270 centros que pidieron ayudas en 2009, sólo 78 son dependientes de la Consejería de Educación, el resto ha crecido al amparo de los municipios.

Pero las carencias, siguen siendo muchas. "Este año sólo 32 ayuntamientos solicitaron a Educación implantar el 2º ciclo de la Enseñanza Secundaria Obligatoria, porque el PP hizo una campaña entre sus alcaldes para que no lo pidieran, para no incrementar la partida de la consejería en formación de adultos", recalca este experto en formación de adultos.

En esa línea de contención oficial, el presupuesto de la Generalitat para 2010 se ha recortado en un 35% respecto del año anterior. La financiación para la formación de adultos en 2009 (contabilizando las ayudas a federaciones, convenios con ayuntamientos, diputaciones y otras ayudas) alcanzó los 4.711.000 euros. En 2010, se ha reducido en más de un tercio hasta los 3.104.679 euros.

"El PP no ha querido entrar en un terreno que no controla, por eso lo que ha hecho es descuidar la don nadie de la formación, que es la formación de adultos", resume. "El modelo de Rajoy, coinciden ambos consultados, es "desviar recursos a la red de centros de formación privados y, a la vez, fomentar el concierto con centros educativos privados".

"Como la Ley de Formación de Personas Adultas no se ha desarrollado como debiera y carece de una financiación ad hoc, a través del Servef (el Servicio Valenciano de Empleo) se ha creado una política de subvenciones, que ha acabado siendo un nicho clientelar y de entretenimiento, sin que medie ninguna garantía de calidad ni de inspección que averigüe que se está haciendo con este segmento de la formación", concluyen.

Los sindicatos CC OO, UGT y STEPV integrados en la Mesa d'Agents pidieron "hace año y medio, por registro de entrada, a la Consejería de Educación la convocatoria de un consejo extraordinario de la FPA". No ha habido respuesta. Pero sí recortes.