'Electra' en la Diagonal

Electra en la Diagonal acomodada, entre Villarroel y Casanova, a tiro de piedra del Sandor y del Turó Parc. La obra de Sófocles, en montaje de Konrad Zschiedrich, inaugura mañana la programación del nuevo teatro barcelonés Akademia, instalado en los bajos de un lujoso edificio a la izquierda del Eixample. La nueva sala (de 300 metros cuadrados, polivalente y con capacidad para 110 espectadores -aunque empezará con la mitad de localidades-, con un aire, en pequeño, al viejo Lliure de Gràcia) y el proyecto artístico y profesional que hay detrás de ella presentan características insólitas en el panorama teatral de la ciudad. Hacía años, desde el Windsor, que no funcionaba una sala teatral en el tramo más céntrico de la gran arteria barcelonesa. Akademia nace, además, del mecenazgo privado y los gastos de acondicionar el local, equiparlo y gestionarlo corren a cuenta de la propiedad del inmueble, que no cobra alquiler al colectivo que lo programa. La tercera peculiaridad del nuevo teatro es, precisamente, su equipo artístico: bajo la dirección de un personaje tan bien conocido de la escena catalana como Mercè Managuerra se ha apiñado un grupo heterogéneo de actores, directores, compañías y pedagogos, muchos de ellos históricos sin teatro, entre los que se cuentan Boris Rotenstein, Andreu Carandell, Coralina Colom y el citado Zschiedrich.

Ayer al presentar la diáfana sala (de inusitadas paredes blancas), aún con el trajín de los últimos retoques, Managuerra habló de las "diferentes complicidades" que se han sumado para hacer posible Akademia. Recordó que el espacio ha funcionado desde hace años, antes de adecuarse al público, como laboratorio teatral, sala de ensayos y sede de cursos, y el papel impulsor que ha tenido en la creación de Akademia (desde su propio nombre) el director ruso Anatoli Vassiliev, que impartió enseñanzas de teatro en 2008. De la filosofía de la sala, Managuerra subrayó que estará dedicada al teatro de texto. "Cuidaremos mucho la palabra", recalcó.

Además de Electra, el teatro programa este mes un espectáculo de clown para todos los públicos (Un Ramón de mandarinas, con Laura Muñoz y Sergi Pons) y Training, montaje coreográfico basado en el método de Avi Grinberg de terapia corporal. Posteriormente, se estrenarán Ismene, germana de Antígona, de Ritsos, dirigida por Rotenstein, y Helena, del mismo autor, por Emilià Carilla. Habrá mucha poesía y una programación infantil. Akademia nace "sin complicidades" en la Administración. "Están perplejos", dijo la directora, que afirmó que llamarán a la puerta pública "lo menos posible".