El Gobierno se compromete a agilizar las ayudas a los afectados por las riadas

El Gobierno central se comprometió ayer a realizar con la "máxima urgencia posible" las valoraciones y los procedimientos administrativos para el pago de ayudas a los afectados por el temporal que está azotando Andalucía durante febrero. El instrumento que se utilizará para hacer llegar las subvenciones a los damnificados es la ley de medidas urgentes para paliar los daños producidos por incendios forestales y otras catástrofes naturales, aprobada por el Senado a mediados de este mes. En esta nueva norma se incluyen, según informó ayer el Ejecutivo, "otros daños" que no estaban previstos en el real decreto de 18 de marzo de 2005, que regulaba hasta ahora las subvenciones tras los desastres naturales y catástrofes.

Tras la reunión del Consejo de Ministros de ayer en Madrid, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, trasladó su "solidaridad" a los afectados por las inundaciones en Andalucía. Fernández de la Vega y el presidente de la Junta, José Antonio Griñán, tienen previsto visitar hoy las zonas inundadas en Palma del Río (Córdoba) y reunirse con los alcaldes de la comarca.

Entre las zonas afectadas que citó ayer el Gobierno central están los cauces del Guadalete en Cádiz; las riadas desatadas en el Guadalquivir en Sevilla, Córdoba y Jaén; el Guadalhorce, en Málaga; y el Eliche y el Guadalbullón, también en Jaén. El Ejecutivo recordó que las lluvias, además de los desalojos, han provocado cortes de carreteras y vías de ferrocarril". El Gobierno sostuvo ayer que "duplicará las ayudas mediante la aplicación a Andalucía de la ley de medidas urgentes".

El decreto de 2005 -que sustituyó a la antigua declaración de zona catastrófica- prevé ayudas de hasta 15.220 euros por destrucción total de vivienda y 10.320 por daños en las estructuras de la casa. Si los daños son no estructurales, las ayudas que ofrece el Estado se quedan en 5.160 euros.