Un adiós en plena polémica municipal

La trayectoria política de Ana Urchueguía (San Sebastián, 1952) ha estado ligada de forma indisociable a Lasarte-Oria (17.665 habitantes). Ha sido la alcaldesa de este municipio desde su constitución como tal el 15 de febrero de 1986, aunque antes presidió durante más de un año la comisión gestora. Entre 1979 y 1985 fue teniente de alcalde de Hernani.

Desde que Lasarte-Oria logró carta de municipio independiente en 1986, el ayuntamiento no conoce otro gobierno municipal que el del PSE-EE liderado por Urchueguía. Ha ganado todas las elecciones celebradas en esta localidad, siempre por mayoría absoluta, a excepción de las últimas locales de 2007, en las que se quedó a falta de un escaño. En todo este tiempo, el trance más terrible vivido por la regidora, recuerda siempre, fue el "mazazo" que supuso que ETA asesinara de un tiro en la cabeza, el 20 de marzo de 2001, al edil socialista Froilán Elespe, su número dos y brazo derecho.

Urchueguía, que también fue senadora una legislatura y miembro de las Juntas Generales de Guipúzcoa, ha enarbolado como una seña de su gestión política el apoyo que su ayuntamiento ha prestado a proyectos de cooperación internacional, destinando a este fin desde hace varios año el 1,5% del presupuesto municipal. Las acciones de ayuda al Tercer Mundo se han dirigido principalmente a la localidad nicaragüense de Somoto, hermanada con Lasarte.

Recientemente, los partidos de la oposición denunciaron la existencia de "irregularidades manifiestas" en la gestión de las subvenciones que el consistorio destinaba a Somoto. A iniciativa del PNV, Hamaikabat, ANV y la Plataforma Ciudadana Lasarte-Oria, el pleno acordó por unanimidad a mediados de diciembre pasado crear una comisión de investigación para analizar este asunto. La alcaldesa se defiende sosteniendo que las críticas de la oposición forman parte de una "campaña de acoso, persecución, calumnias e infamias" contra su persona.

En medio de esta polémica, Urchueguía abandona ahora la alcaldía para trasladarse a Chile. En breve deberá convocar un pleno para elegir a su sucesor, quien deberá hacerse cargo de un gobierno monocolor tras romperse en octubre pasado el acuerdo con EB.