_
_
_
_
Reportaje:

Machado, pobre y sin Cambridge

El poeta murió sin saber que la mítica Universidad le ofrecía trabajo

Antonio Machado murió rodeado de frío y miseria. La suya fue una de esas muertes que confirman las peores pesadillas. Y falleció cuando había una luz de esperanza que el poeta nunca percibió. Al día siguiente de ser enterrado llegó una carta procedente de la Universidad de Cambridge. El viejo centro de sabiduría inglesa aquilatada por los siglos ofrecía a Machado un puesto en su rectorado.

El autor de Campos de Castilla murió sin saberlo. Por cuestión de días podía haber pasado de la pobreza y la derrota a la tranquilidad de un campus británico, lejos de los estertores de una Guerra Civil que destruyó la vida de miles de personas. Esta revelación la hizo pública el pasado martes la creadora de la Fundación Antonio Machado de Collioure (Francia), Monique Alonso, en la Semana Machadiana en Baeza (Jaén).

El Ayuntamiento de Collioure negocia la compra del hotel donde falleció
Una suscripción popular costeó el panteón familiar del escritor

En enero de 1939, la frontera hispano-francesa era testigo del éxodo de miles de republicanos que huían del avance de las tropas rebeldes. Entre los derrotados estaba Machado, que llegó con muchas penalidades hasta la pequeña localidad de Collioure acompañado de su madre, Ana Ruiz, su hermano José y su cuñada Matea Monedero.

El poeta sevillano tenía 64 años y estaba enfermo. Se hospedó con su familia en el hotel Bougnol-Quintana, que se convirtió en su último lecho. El agravamiento de su neumonía hizo que perdiera la vida el 22 de febrero. Tres días después lo hizo su madre, de 88 años y que estaba inválida.

Ahora, el Ayuntamiento de Collioure negocia la compra del hotel Bougnol-Quintana (cerrado desde hace años) con la intención de convertirlo en museo del poeta español, según señaló Monique Alonso, en la Semana Machadiana, con la que se conmemora el 71º aniversario de su muerte. "La operación está casi cerrada", agregó Alonso, que destacó que la habitación en la que murió Machado, con vistas al mar, se conserva casi intacta.

La creadora de la Fundación Machado exhibió una carta enviada por Giner Pantoja, que ejercía de representante de la familia, a su hermano José Machado, donde le explicaba el proceso para que los restos de Antonio dejaran el nicho prestado en el que fueron enterrados en 1939 para pasar, 18 años después, a un panteón familiar en el que también están los restos de su madre.

"La repentina muerte de Machado hizo que fuera enterrado en un nicho prestado por una amiga de la señora Quintana, la dueña del hotel, pero con el tiempo vieron que ese nicho podía ser requerido por sus propietarios". Fue entonces cuando el Ayuntamiento de Collioure cedió unos terrenos en el cementerio local y, mediante una suscripción popular alentada por un artículo publicado en la prensa francesa en 1957, se costeó el panteón de los Machado.

Pero, sobre todo, Alonso aportó en su intervención una carta enviada a Machado y que llegó demasiado tarde: al día siguiente de ser enterrado. Procedía de la Universidad de Cambridge y le ofrecía trabajo. "Se murió sin conocer este ofrecimiento", evocó Alonso en Baeza, donde Machado trabajó siete años como catedrático de francés en el instituto Santísima Trinidad.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_