Una grada estelar

El póster de dos estrellas del baloncesto saltando para poner o quitar un balón del cesto bajo la mirada de la multitud, cifrada en 108.713 espectadores, reunidos en el espectacular Cowboys Stadium de Dallas. Ésa es la imagen que pasará a la historia del All Star de 2010, que el equipo del Este ganó en un apretado final por 141-139. "Ha sido grandioso. Como si los dos equipos dijéramos: 'Todo lo que hagamos formará parte de la historia, de un extraordinario evento que permanecerá en nuestras mentes y nuestros corazones por mucho tiempo", afirmó Dwyane Wade, que ya en 2006 había logrado en Dallas su único anillo de campeón. El escolta de Miami Heat se erigió en el mejor del partido y fue designado jugador más valioso (MVP) gracias a los 28 puntos, seis rebotes y 11 asistencias que sumó en los 31 minutos que estuvo en la pista. "Ha demostrado que es uno de los mejores del planeta", reconoció con elegancia LeBromvpJames, principal candidato a mvp, que cuajó también un excelente partido con 25 puntos, cinco rebotes y seis asistencias, pero que no fue tan determinante como Wade.

Después del partido, la FIBA designó a Gasol mejor jugador europeo de 2009

"Ha sido un All Star precioso y bien jugado, aunque la última acción no haya acabado como habríamos deseado", explicó George Karl, el entrenador del conjunto del Oeste, en referencia a la jugada, tras dos tiros anotados por Bosh y a cinco segundos del final, que concluyó con un intento triple de Carmelo Anthony que se quedó corto. Nowitzki, el héroe local, la máquina anotadora de Dallas Mavericks, estaba preparado para rematar el partido, pero se la jugó Melo y salió cruz para su cuadro.

Kobe Bryant, lesionado, y Shaquille O'Neal, los dos hombres que compartieron el mvp de la pasada temporada, vieron desde la grada cómo sus rivales del Este se tomaron la revancha de un año antes, cuando el Oeste ganó por 134-128 en Phoenix. Aquel día Pau Gasol sumó 14 puntos y ocho asistencias. Esta vez, en su tercer All Star, su aportación fue similar: 13 puntos y seis rebotes en 20 minutos. "Ha sido una experiencia genial y me ha encantado vivirla. Estoy satisfecho, aunque me habría gustado ganar", comentó el pívot de los Lakers, a quien pocas horas después la federación internacional (FIBA) comunicó que, por segunda vez consecutiva, le había designado mejor jugador europeo de baloncesto en 2009, año en que condujo a la selección española a la victoria en el Eurobasket de Polonia. Gasol superó en la votación a Nowitzki, que fue el mejor en 2005, y al serbio Teodosic, del Olympiacos.

La magnificencia del Cowboys Stadium fue el punto fuerte de la fiesta. El recinto es espectacular. Su techo retráctil permaneció cerrado debido al frío reinante durante los últimos días en Dallas. En un recinto de tales dimensiones es imposible que la visión sea siquiera aceptable para más de la mitad de los espectadores. Pero el público pudo apreciar los detalles y los primeros planos a través de una gigantesca pantalla de vídeo suspendida del techo y que mide el doble que una pista de baloncesto.

El récord de asistencia a un partido de baloncesto era de 78.129 espectadores, los que presenciaron la final de la Liga Universitaria norteamericana entre Kentucky y Michigan en 2003 en el Ford Field, de Detroit.