De iluminar a amueblar parques

"Ahora las cosas ya no van mal porque haya crisis. Ahora simplemente España está en el nivel que le tocaba, en el que hay que trabajar para crecer". Con esta filosofía, Simon Holding, el fabricante español líder en el mercado de pequeño material eléctrico, se enfrenta a los nuevos tiempos. Su director general, Xavier Torra, lo tiene claro: deben proteger el producto que llevan fabricando desde 1916. Pero si hay que abrir nuevos mercados, los abrirán. Ahora venderán también mobiliario urbano, productos de seguridad como alarmas y podrían probar suerte hasta con suelos. Lo que haga falta para recuperar la facturación de 2007.

Torra se sabe de memoria el emplazamiento de sus 15 fábricas en el mundo. Y las conoce al dedillo. Pero para saber dónde exportan tiene que tirar de chuleta. No es extraño, porque las 24 filiales del grupo trabajan en más de 50 países. Esta empresa familiar, que empezó hace más de 90 años siendo un pequeño taller de portalámparas de Olot (Girona), en 2009 abrió una fábrica en la India y este año abrirá su tercera factoría en China. "Con ellos nos entendemos en spanglish, pero nos entendemos bien", bromea Torra.

La facturación es ahora de 230 millones de euros al año, frente a los 350 millones de 2007. Han prescindido de 500 trabajadores y tienen un ERE temporal en marcha para los casi 1.000 trabajadores de España. Pero aun así, el balance les parece positivo. "El sector eléctrico ha perdido cerca del 35% de las ventas, mientras que nosotros casi no hemos perdido nada en 2009. La facturación ha bajado un 10%, pero no nos preocupa. En los países extranjeros en los que operamos hemos crecido". El 40% de sus ventas va a mercados extranjeros. "No me extrañaría que en unos años ocurriera lo contrario, porque España se está comportando peor que el resto de países". La crisis inmobiliaria ha pasado factura. Y los 800.000 pisos que se construían cada año ya son historia. Ahora toca pelear para vender cada enchufe y cada temporizador.

En la sede central de la firma, en Barcelona, tienen un amplio espacio reservado a mostrar productos. Donde antes había sólo interruptores y domótica, hoy hay bancos, farolas de leds y maceteros gigantes. Son sus nuevos productos. "Ahora nos centramos en abrir nuevas líneas de negocios. La construcción sigue parada, pero hay otras oportunidades. Es atípico, pero ¿por qué no?". También han entrado en el mercado de la seguridad con paquetes de alarmas de "fácil instalación" que permiten vigilar por el móvil la entrada de la casa con fotografías, por ejemplo. "Y en verano sacaremos otra línea más", adelanta.

Nuevos productos y nuevos mercados. "En Brasil se notan los preparativos de los Juegos Olímpicos. Hemos logrado un contrato para instalar 40.000 puntos de luz en Río de Janeiro", explican. También instalarán otros 30.000 puntos en Ciudad de México.

"Nuestro objetivo era mantener la liquidez y no perder dinero. Lo hemos logrado", dice el directivo. Para rematar la nueva estrategia han tirado de compras. Se han hecho con la asturiana Temper, que fabrica temporizadores de caldera, con una facturación de unos tres millones. "Siempre cuidamos la liquidez. Nunca nos gastaremos lo que no tenemos, pero si hay oportunidades, intentaremos aprovecharlas", advierte.

A pesar de que prometen que la empresa marcha bien, y marchará mejor, reconocen que actualmente trabajan en las factorías españolas a la mitad de su capacidad. Y en el grupo hay algunos subsectores que han caído un 50%. Por suerte, otros han compensado. Para 2010 esperan crecimiento, pero moderado. "En cuatro años pensamos recuperar los niveles de 2007, cuando la facturación llegaba a los 350 millones".

Saben que no es fácil dar salida rápida a todo el producto. Por eso, han invertido más de siete millones en un almacén de logística en Girona, para almacenar lo que llega de fuera, por ejemplo, de China, y los nuevos stocks de mobiliario urbano. "Con el Plan E hicimos acuerdos con ayuntamientos e instalamos farolas. Si hay otro, pondremos bancos, papeleras y lo que haga falta", dice confiado.