Instituciones Penitenciarias vigilará desde hoy que El Rafita acuda a firmar dos veces al mes
Instituciones Penitenciarias (dependiente del Ministerio del Interior) ha acabado asumiendo la libertad vigilada de El Rafita y de otros nueve jóvenes, condenados todos ellos por delitos muy graves, que hasta ahora nadie controlaba. Pero en el caso de Rafael Fernández, condenado a los 14 años por el asesinato de Sandra Palo, no se le aplicará ninguna medida excepcional y hará lo que hasta ahora: firmar el 1 y 15 de cada mes. El condenado cambia de manos de forma fehaciente.
Reunidos después de que El Rafita fuese detenido el sábado por el intento de robo de un coche y saliese a la luz que ni la Comunidad de Madrid ni Instituciones Penitenciarias le controlaban, estas dos entidades se reunieron ayer, junto a miembros del Consejo General del Poder Judicial y del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, entre otros, y acordaron que el expediente de Fernández, de 21 años, esté ya en Instituciones Penitenciarias. Se ha llegado a la conclusión de que no se le puede aplicar ninguna medida que no haya tenido hasta ahora. Otra cosa sería ilegal.
"Mi tiempo es oro y vale mucho dinero", asegura El Rafita
En los informes realizados por técnicos que controlaban su libertad vigilada en Andalucía, comunidad en la que ha estado un par de años El Rafita, se señala que el chico, que ha abandonado sus cursos de carpintería, el carné de conducir y un voluntariado que hacía con niños de la ONCE, no ha podido rehacer su vida.
En parte, porque fue perseguido por medios de información que llegaron a grabarle con cámara oculta (cambió varias veces de centro y pasó temporadas en hoteles) y también por la "baja autoestima" que, según el perito, tiene sobre su capacidad para estudiar o aprender un oficio.
La solución de dejar a El Rafita en manos de Instituciones Penitenciarias dejó una sensación de victoria en los responsables del Gobierno regional (que se quita de en medio el control de una decena de jóvenes con delitos violentos a sus espaldas) y un regusto amargo en Instituciones Penitenciarias.
"El Rafita ha cambiado de manos. Si en los cuatro meses de libertad vigilada que le quedan comete algún otro delito no se mirará a Aguirre (presidenta de la Comunidad de Madrid) y sí a Rubalcaba (ministro de Interior)", se comentaba tras la reunión.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
- Delincuencia juvenil
- Ley del menor
- Hurto
- Atracos
- Rafael García Fernández
- VIII Legislatura CAM
- Consejerías autonómicas
- Instituciones penitenciarias
- Gobierno Comunidad Madrid
- Robos
- Menores
- Edad penal
- Motocicletas
- Legislación española
- Parlamentos autonómicos
- Coches
- Responsabilidad penal
- Código penal
- Vehículos
- Delincuencia
- Gobierno autonómico
- Parlamento
- Asesinatos
- Transporte carretera
- Responsabilidad penal menores