Gobierno y equipos piden unas regatas sin gran fasto
La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, ha dicho en varias ocasiones que está en contacto con el Gobierno español con vistas a elaborar un presupuesto que sostenga la celebración de las regatas a dos de la Copa del América. La regidora quiere vestir la competición prevista a principios de febrero en aguas de Valencia con actos y eventos en torno a la Copa. Y así lleva días manifestándose. Desde el Gobierno e incluso de los equipos se pide, sin embargo, austeridad, sobre todo por la crisis.
Desde la vicepresidencia segunda del Gobierno se considera que haber conseguido la competición ha sido un gran logro, sobre todo por los problemas surgidos en torno a la sede, pero insisten en que, "teniendo en cuenta la coyuntura económica actual deberíamos dar ejemplo de austeridad y no organizar ni ceremonias ni eventos" como los que tuvieron lugar en la 32ª edición de 2007. El director del gabinete de la vicepresidenta Elena Salgado, Luis Díez, rubrica la carta remitida a la alcaldesa de Valencia. En ella, Díez asegura que los dos equipos, el Alinghi y el BMW-Oracle, les han transmitido que no había interés por los grandes eventos.
En la misma misiva, fechada el 23 de diciembre, el Gobierno español informa a Barberá que ha puesto en marcha el real decreto de beneficios fiscales, y se da por enterado de que antes de que el Consorcio Valencia 2007 lleve a cabo actuaciones relacionadas con la organización de la 33ª edición de la Copa del América "será necesario que la Societè Nautique de Genève (SNG) le ceda los derechos que tiene en relación con la citada edición a través del adecuado instrumento financiero".
Por último, el director de gabinete de Salgado insiste en que dada la envergadura de las embarcaciones que participarán, pueden aparecer problemas técnicos para su acceso a la dársena interior de la Marina. Por eso pide que se sea flexible y se facilite el uso del puerto comercial "si así resulta más aconsejable".
La organización de las regatas no está siendo además de una balsa de aceite, por las diferencias de los dos equipos. En la reunión del consorcio celebrada la pasada semana discreparon sobre las fechas de inicio de la competición. Ahora el Oracle ha abierto otro frente por las velas del Alinghi. Los norteamericanos han protestado porque consideran que el velamen se ha fabricado en EE UU y eso contraviene las normas. El Oracle ya ha anunciado que recurrirán al jurado si los suizos no las cambian.
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