Bromas escénicas con la lidia
'La fiesta del toro' se presenta en plena polémica taurina
Ni hecho a propósito. En plena polémica por la iniciativa para prohibir las corridas de toros en Barcelona llega a la ciudad (Teatre del Raval, a partir de hoy) la disparatada comedia La fiesta del toro, a cargo de la compañía de autorreferencial nombre 2 Toreros 2, un espectáculo que se publicita como "crítica ácida y con grandes dosis de humor" del mundo de la lidia.
Protagonizada por el gaditano José Manuel Poga y el pontevedrés Paulo Medal, esta obra -que pretende suscitar debate (más) y reflexión, pero sobre todo risa, sobre el asunto- se centra en dos toreros, el desventurado matador Infinito (sic) de Córdoba y su fiel mozo de espada, El Berberecho de las Rías Baixas, que han de lidiar, y valga la palabra, con una corrida harto difícil en la mismísima Maestranza de Sevilla.
De entrada el toro se ha ido de parranda a Pamplona, luego se niega a ser toreado, después hay que desatascarlo porque se queda encajonado entre el burladero y las tablas, y al final el matador le coge cariño y se niega a matarlo. El espectáculo, creado y dirigido por el mismo dúo de actores, es una suma de gags que recrean con gracia y desvergüenza (y con un vídeo hilarante) el ambiente taurino en el escenario.