El contragolpe perfecto

La primera y la última vez que el Madrid visitó el Velódromo de Marsella, el 26 de noviembre de 2003, Beckham abrió el marcador y Ronaldo lo cerró. Fue la culminación de la época dorada de Florentino Pérez al frente del club. El último año de su primer mandato. Casillas será el único titular de aquel equipo en el de hoy. Igual que entonces, el Madrid llega al encuentro sin excesiva presión. Es el líder de su grupo y para pasar a los octavos de final de la Champions le basta con evitar que su rival le gane por tres goles de diferencia. Como dijo Lass ayer pasándose la lengua por los labios: "En el fútbol puede ocurrir de todo. Pero para que nos metan tres goles... Primero, hace falta encajarlos. Llegamos serenos y concentrados. Creemos que podemos hacer un buen partido".

Lass: "En el fútbol puede ocurrir de todo. Pero para que nos metan tres goles..."

Obligado a la goleada, se espera que el Marsella lance un ataque masivo sobre el área de Casillas. La defensa del equipo francés no es la más rápida del continente. Habrá espacios para los delanteros rápidos. El panorama parece ideal para que Cristiano, Higuaín y Benzema lancen el contragolpe perfecto.

"No cambia nada", aseguró Manuel Pellegrini, el técnico, cuando le preguntaron si haría un planteamiento conservador pensando en evitar la goleada antes que en atacar. "Nosotros no venimos a refugiarnos en un marcador. Vamos a salir desde el primer minuto a ganar al Marsella y a clasificarnos los primeros del grupo. Y creo que Cristiano va a hacer un muy buen partido. Está sin ningún tipo de problemas físicos, como se vio ante el Almería".

El duelo del Camp Nou contra el Barça le quitó un peso de encima a la plantilla del Madrid, que ahora navega con viento favorable. A pesar de los sobresaltos frente al Almería, el sábado pasado en la Liga, los jugadores sienten que han confirmado su poderío. El regreso de Cristiano ha proporcionado al equipo una dosis de confianza y coherencia imprescindible. La ausencia de Kaká, con problemas de pubis, parece una baja remediable con el portugués en liza.

El regreso de Lass a la alineación da potencia al medio campo. A Pellegrini le queda por resolver la composición del ataque. Con Kaká fuera de combate y sin plazo de regreso, reservado al tratamiento fisioterapéutico, y con Higuaín y Cristiano instalados en la formación de salida, a Pellegrini le resta tomar una decisión para cubrir la vacante. La cuestión es simple: Benzema o Raúl. Que el chileno se incline por el capitán parece poco probable. Ha sido titular una sola vez en el último mes. Contra el Zúrich y en el Bernabéu, un escenario que se ajusta menos al contraataque que el Velódromo.