La Universitat reconoce a Vicente Montés doctor 'honoris causa' a título póstumo

El catedrático de Derecho Civil Vicente Montés fue ayer nombrado doctor honoris causa por la Universitat de València. El reconocimiento pone fin, como dijo el rector Francisco Tomás, a una "realidad anómala". Su retrato dominaba el estrado del acto solemne celebrado en el Paraninfo. Su familia escuchó el sentido recuerdo de un humanista que se dedicó sobre todo al derecho civil pero aferrado a la música, a la literatura, a la poesía, a la curiosidad de la ciencia, a la docencia, a la conversación, a la que llamó la toscana valenciana refiriéndose a La Vall dels Alforins.

Su hijo Luis leyó el borrador del discurso que su padre redactaba cuando murió el pasado 8 de agosto víctima de un cáncer, a los 66 años. En él, recordaba la Valencia de 1959, de la universidad que encontró a la que calificaba de desarraigada, burocrática e insignificante; de aquellos que rompieron ese círculo e iniciaron un cambio, nombres como Joan Fuster, Lluís Alpera, Vicent Garcés, Vicent Andrés Estellés, Martí Domínguez, de un tiempo en el que estalló una "primavera política" que otros derivaron en un "otoño caliente y represivo"; se acordó de profesores y de sueños, de Derecho y de la vida.

Por su magisterio y por su legado vital fue homenajeado ayer por el catedrático Francisco Blasco, uno de sus discípulos; por el rector de la Universidad de Murcia, Antonio Cobacho Gómez; por el presidente de la sala primera del Tribunal Supremo, a la que Montés pertenecía, Juan Antonio Xiol Ríos; por el catedrático de Derecho Civil Ángel López López; por el rector; y por la consejera de Justicia, Paula Sánchez de León. Amparo Reig Monzó, su viuda, recogió el título póstumo a su marido. Las causas de honor: la generosidad, la inteligencia, la valentía, la sabiduría y el respeto al maestro.