Un atunero vasco impide a tiros un abordaje frente a la costa somalí

Los vigilantes armados que iban embarcados en el pesquero vasco Ortube Berria lograron repeler ayer a tiros un intento de abordaje de piratas a unas 230 millas al suroeste de las islas Seychelles. El barco fue perseguido durante 30 minutos por dos lanchas con cuatro piratas cada una, que llegaron a disparar sus rifles automáticos e incluso una granada antitanque RPG, que no impactó contra el atunero. "Les dimos una ráfaga de advertencia de que estábamos armados, pero no nos han hecho ni caso y han empezado a disparar", declaró ayer Iker Barbas, patrón del Ortube Berria, a la cadena SER. No hay heridos en el pesquero español, pese a que recibió al menos seis impactos de bala.

El ataque fue comunicado a las 5.40, hora española, por el pesquero Intertuna III, que advirtió al Centro de Operaciones de Vigilancia Marítima de que el Ortube Berria estaba siendo atacado en esos momentos, según un comunicado hecho público ayer por el Ministerio de Defensa. La agresión fue confirmada por Iker Barbas, quien comunicó al centro de operaciones su localización y el relato de los hechos.

"Les disparamos, pero no desistían", según el patrón del barco español

Los dos esquifes fueron avistados cuando ya se dirigían a toda máquina hacia el atunero. Durante media hora fueron a la caza del pesquero, hasta llegar a situarse a unos 700 metros. Fue entonces cuando los vigilantes de seguridad dispararon ráfagas de advertencia para intentar disuadir a los piratas. Pero éstos, en lugar de desistir, respondieron "con armas ligeras y una granada RPG", un artefacto antitanque que, afortunadamente, no impactó en el Ortube Berria.

"Tenemos seis impactos encima del puente. No desisten, hoy no desistían. Si yo no llego a estar armado, ahora mismo estoy camino de Somalia, y si llega a pasar esto 20 días antes, también estoy cogido", explicó el patrón. Éste confirmó que no habían sufrido ningún tipo de daño personal y que navegaba libremente hacia el sur de la zona. Sin embargo, no hay información alguna sobre si hubo heridos entre los ocho piratas que mantuvieron la persecución.

Defensa informó de que el comandante de la Operación Atalanta envió hacia la zona a la fragata portuguesa Alvares Cabral (que el pasado 19 capturó a cuatro piratas que luego tuvo que liberar) y a un avión de patrulla marítima. "El mando de Atalanta optó por no asignar a esta misión a la fragata Canarias, que se encontraba a 600 millas náuticas al noreste del lugar de los hechos", según Defensa.

El ataque es el tercero que los atuneros vascos logran repeler desde que el pasado día 12 se embarcaron vigilantes de seguridad para contener los ataques piratas, tras el secuestro del Alakrana, que se ha prolongado durante 47 días. El penúltimo ataque fue contra el pesquero Artza, que logró, tras unas ráfagas de advertencia, que los bucaneros se dieran media vuelta, el pasado 31 de octubre.

"Ahora está muy calmado el mar y se atreven a salir más", declaró ayer el patrón de Ortube Berria. "Aquí cada vez se oye hablar de más ataques, y no sé si es porque nosotros estamos también armados", concluyó.