La demografía conquista la Bolsa
Los aspectos relacionados con la población tienen cada vez más peso en el mercado
Envejecimiento, esperanza de vida, tasas de mortalidad y natalidad, migraciones... En el futuro, si quiere ganar dinero en Bolsa, deberá dedicar casi el mismo tiempo al estudio de estas variables como el que ahora destina al seguimiento del PIB o las cuentas empresariales. En los últimos años, la demografía se ha ganado un hueco en el mundo de la inversión. Se trata de un factor cada vez más determinante a la hora de confeccionar una estrategia rentable, y eso se nota en los numerosos estudios que publican bancos de inversión y gestoras sobre temas relacionados con los cambios en la población.
El aspecto demográfico que más de cerca siguen los mercados es el envejecimiento de la población. De acuerdo con el US Census Bureau, la población mundial mayor de 65 años se doblará entre 2000 y 2030. Este grupo incrementará su peso desde el 7% hasta el 12% de la población mundial. Es una tendencia que no ocurre sólo en el mundo desarrollado, sino también en los países en vías de desarrollo, donde el número de individuos mayores de 65 años está previsto que se multiplique por tres durante este periodo. De forma paralela, se ha producido un cambio en las causas de mortalidad desde enfermedades infecciosas y agudas hacia dolencias crónicas y degenerativas.
La población mayor de 65 años se doblará entre 2000 y 2030
Los primeros de la generación del 'baby boom' empiezan a jubilarse
Hay una revolución en los patrones de consumo de la tercera edad
En 2025, tres de las 10 ciudades más pobladas del mundo estarán en la India
"Recomendamos invertir una parte de la cartera en compañías del sector sanitario que se beneficien del envejecimiento de la población", señalan Thomas C. Kaufmann y Grégoire Biollaz, analistas de Credit Suisse, en el último número de la revista Global Investor. Estos expertos incluyen entre sus favoritas a empresas farmacéuticas, productores de genéricos y fabricantes de material quirúrgico, como Roche (fármacos oncológicos),
Synthes (líder mundial en traumatología), Novartis (productos de rejuvenecimiento), Fresenius Medical (diálisis y tratamientos renales),
Teva (genéricos) y Medtrónic (material cardiaco).
"Las estrategias de inversión basadas en las dinámicas de la población son a muy largo plazo las que tendrán un papel importante durante décadas", explica Tom Beepers, gestor de Newton. "En el área de la salud, nuestro valor favorito es el productor de rodillas y caderas artificiales
Smith & Nephew. La demanda de este tipo de artilugios aumentará en la medida en que la gente está dispuesta a gastar más para alargar en el tiempo su calidad de vida", añade.
Una de las gestoras que más atención prestan a los aspectos demográficos es Schroders. En un informe reciente advertía de la peliaguda situación que afrontará Europa. El Viejo Continente será también el continente más viejo. Europa verá cómo su población empieza a caer en los próximos 10 años. Además, mientras que en 1900 la población mayor de 65 años suponía el 5% del total, en 2050 se prevé que llegue al 30%.
"En primer lugar, el envejecimiento de la población lastrará el crecimiento económico. La Comisión Europea, por ejemplo, calcula que el crecimiento potencial del PIB en la UE caerá del 2,4% al 1,3% en 2060", señalan desde Schroders. "En segundo lugar, el impacto que una sociedad más vieja, en ausencia de una reforma fiscal a fondo, tendrá en los presupuestos será sustancial. El coste combinado de pensiones públicas, salud y cuidados de larga duración se espera que alcance una media del 28% del PIB en 2060".
En opinión de Virginie Maisonneuve, jefa de renta variable global de Schroders, las consecuencias demográficas en Europa significan que la selección de valores y la gestión activa serán cada vez más importantes: "Será clave para batir de forma sostenible a los mercados la habilidad para descifrar la interacción entre los ciclos macroeconómicos y las tendencias demográficas".
Otro aspecto demográfico a tener en cuenta tiene que ver con los denominados baby boomers, es decir, los nacidos entre 1946 y 1964. Los mayores de esta generación empiezan a jubilarse ahora. ¿Qué consecuencias tendrá? Prisca Boxler, directora del Forum para la Demografía y el Envejecimiento Mundial, e Ilona Kickbusch, del Instituto de Estudios Internacionales y Desarrollo, han publicado un artículo en la revista que Credit Suisse distribuye entre sus clientes acerca del impacto que tendrá para el consumo el paso a la jubilación de los baby boomers. La principal conclusión de estas expertas es que el inversor tiene que borrar de su mente los patrones de consumo asociados tradicionalmente a la gente mayor.
"Se trata de la primera generación en envejecer con un alto grado de salud y educación, y con una seguridad económica significativa. Teniendo en cuenta el alto porcentaje de población a la que representa, este colectivo está transformando la idea de hacerse mayor. Corren maratones, salen por la noche, trabajan como voluntarios... en definitiva, son visibles y activos", explican Boxler y Kickbusch.
"¿Quién se habría imaginado hace 40 años que los Rolling Stone seguirían de gira y que la edad media en muchos conciertos de rock superaría los 60 años? ¿Quién habría pensado que la venta de guitarras eléctricas en Japón habría alcanzado su pico hace unos años con la jubilación de los primeros baby boomers? ¿Quién diría que uno de principales grupos en Internet serían los mayores de 50 años?", explican estas expertas.
Otro de los temas relacionados con la población que marcarán el devenir de la Bolsa es la explosión demográfica en China y la India. Las previsiones indican que aportarán un cuarto del incremento de la población de ahora hasta 2050, y más de un tercio en las áreas urbanas. Los chinos que vivirán en ciudades se incrementarán en un número superior al de la población actual de EE UU, y en 2025, tres de las 10 ciudades más pobladas del planeta estarán en la India. "Hay una revolución demográfica en estos países, con cientos de millones de personas que acceden a una mejor calidad de vida. Esta clase media emergente empieza a demandar infraestructuras, mejores alimentos, ofertas para su ocio...", argumenta Graham French, gestor del fondo M&G Global Basics. Alberto Spagnolo, director de inversiones de Merrill Lynch, comparte esta idea: "El impacto en el consumo es muy elevado. Basta decir que en octubre, por primera vez en la historia, los chinos compraron más coches que los estadounidenses".
La brecha de género
La desigualdad de género persiste tanto en los países desarrollados como en aquellos aún en vías de desarrollo. Sin embargo, tal y como destaca Goldman Sachs en un reciente estudio, las mujeres de los países BRIC (Brasil, Rusia, India y China) y del grupo conocido como N-11 (Bangladesh, Egipto, Indonesia, Irán, Corea del Sur, México, Nigeria, Pakistán, Filipinas, Turquía y Vietnam) "han obtenido significativos avances en educación, salud, empleo y representatividad política".
Los expertos del banco de inversión consideran que esta tendencia tiene un impacto económico en estos países. En concreto, Goldman Sachs destaca dos consecuencias: "En primer lugar, están cambiando los patrones de consumo de los hogares, con un incremento del gasto en salud, educación y bienestar para la familia. En segundo lugar, está aumentando la tasa de ahorro de las familias".
De forma paralela al estrechamiento de las diferencias de género, en estos países se está produciendo otro fenómeno, como es el rápido crecimiento de la clase media. En opinión de los analistas, la suma de ambos factores sugiere que los hogares "no sólo van a gastar más, sino que van a gastar de forma diferente". En los próximos cinco años, los países que más notarán el incremento de la renta media y la incorporación de la mujer a las decisiones de gasto serán, según Goldman Sachs, China y la India, seguidos por Vietnam, México, Brasil e Indonesia. -
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